Lo que más me gustó fue **las opciones sin gluten para el desayuno**. El personal fue servicial y la ubicación era perfecta, cerca de tiendas y restaurantes. Las habitaciones estaban limpias, pero faltaban algunas comodidades. Pese a esto, ¡una estancia agradable! 🌟

El Hotel Fenix en Andorra la Vieja resultó ser una elección estupenda para mi viaje de negocios, ya que está perfectamente ubicado cerca de la zona de compras de Escaldes-Andorra y el centro termal de Caldea. Además, la zona de bienestar del hotel, que incluye una terraza con impresionantes vistas de Escaldes, una pequeña piscina cubierta y una sauna, proporcionó un ambiente relajante para disfrutar después de un día ocupado. La combinación de estas instalaciones y la conveniencia de estar cerca de las atracciones locales hizo que mi estancia fuera muy agradable.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Nos cambiaron de habitación de manera muy atenta, nos permitieron ingresar antes de la hora programada y disfrutar del excelente desayuno. La ubicación es inmejorable, a pocos minutos de Caldea y la zona comercial. Destaco la comodidad de la habitación y el detalle del espacio para tomar café gratis en el hall. A pesar de la falta de desayuno self-service, el personal hizo lo posible por contentar a los huéspedes. La cena fue estupenda y el servicio rápido. En cuanto a las instalaciones de relajación, el spa y la terraza solarium añadieron un toque especial a nuestra estancia, complementado por la sauna y la sala de ocio. Respecto a los sitios de interés cercanos, la proximidad del Barri Antic, Plaza del Poble y el Mirador de la Comella realzaron nuestra experiencia familiar, permitiéndonos disfrutar de momentos únicos juntos. La visita a la Casa Lacruz y el Pont d'Engordany añadieron un aire cultural a nuestro viaje, enriqueciendo nuestro tiempo juntos.

Tremenda variedad de actividades y diversión con mi familia. Excursiones al aire libre, deportes emocionantes, ¡incluso una pista de hielo! Disfrutamos de deliciosos cócteles y tapas después de un día lleno de aventuras. Las vistas desde la terraza son increíbles. ¡Y la música en vivo en las noches fue genial! Sin duda volveré por más diversión y relajación en este lugar maravilloso.

Me encantó la decoración del hotel, especialmente la zona de estar con café y dulces. Las alfombras y el mobiliario le dieron un ambiente acogedor y elegante que hizo que me sintiera como en casa. Además, las áreas comunes eran accesibles para personas mayores, lo cual fue de gran ayuda para moverme con comodidad por el hotel.

Me encantaría que el personal se asegurara de mantener la zona de estar ordenada para que las personas mayores puedan disfrutar de ella sin tener que buscar suministros o esquivar desorden.

Elegí el hotel Fenix solo por su ubicación junto al Parc Central, pero me sorprendió gratamente la seguridad y la diversidad de ofertas en este hermoso país. Además, disfruté de la deliciosa cocina del restaurante Kronos, que ofrece una variedad de tapas y platos exquisitos, realzando los sabores con materias primas de calidad.

Problemas de estacionamiento y desayuno limitado.

Obtuve un gran valor por mi dinero. La habitación era cómoda, elegante y tranquila, con vistas maravillosas. La ubicación del hotel es perfecta tanto para Caldea como para la zona comercial. El personal fue amable y atento durante toda mi estancia.

La opción del desayuno podría ser más variada para satisfacer a todos los huéspedes.

Disfruté de las actividades familiares, la comida del food truck y las exquisitas tapas en la terraza con DJ. ¡Vivencias inolvidables! Qué moderno el problema de los desequilibrios producidos por la tecnología. ¡Fascinante!

Maravilloso olvidar el bañador y no poder usar la piscina. Cómo lo disfruté.

Disfrutamos de una emocionante jornada de esquí en Vallnord-Pal Arinsal, con más de 63 km de pistas para principiantes e intermedios. Después, exploramos valles y ascensión a picos en parques naturales. Además, nos encantó la experiencia de cenar al aire libre con música en vivo en el restaurante del hotel.

Mi mujer dice que para los padres de familia estaría bien tener actividades supervisadas para niños.

Nos ha gustado mucho nuestra estancia en Golden Tulip. La habitación era amplia y cuidada, con una cómoda cama de matrimonio y un sofá cama para los niños. El mobiliario era clásico pero bien mantenido. Además, teníamos acceso a la piscina, donde pudimos disfrutar de un buen rato con los peques. El desayuno era variado y completo, y los menús de cena estaban bien. El personal del hotel fue muy amable y atento, especialmente Claudia en el restaurante. nos gustó que tuvieran una zona de cortesía en la recepción con agua, infusiones y café. En general, hemos tenido una buena experiencia y recomendamos este hotel.

La entrada y salida hacia la calle principal podría ser más accesible para personas con movilidad reducida o carritos de bebé. Además, el suplemento de 7 euros para acceder al spa nos pareció un poco caro para el tamaño del mismo.

Siempre vuelvo porque la primera vez me ayudaron con el registro tarde. Tiene Wi-Fi, gimnasio, piscina cubierta, bar y restaurante. ofrece servicio de traslado. La ubicación es ideal y volveré por trabajo.

Las habitaciones en Fenix Hotel son súper cómodas y modernas. Me encantó el servicio de la máquina de café que siempre estaba listo. Como amante del café, esto fue un gran plus para mí, ¡me sentí como en casa!

Quizás a algunos les moleste el ruido de la calle, pero para nosotros no fue un problema.

La ubicación del hotel era excelente, ya que estaba situado detrás de la calle principal. Al reservar la habitación, nos incluyó un baño completo con una relajante bañera de hidromasaje. Además, teníamos acceso a la piscina y la sauna, que estaban ubicadas en la última planta del hotel. También disfrutamos de un mini-bar sin coste adicional. En el hall del hotel, había una zona con café, infusiones y bizcocho, que podíamos disfrutar en cualquier momento. Lo que más me gustó fue el servicio del personal, quienes fueron muy amables y serviciales durante toda nuestra estadía.

El hotel está en pleno centro de Andorra, con una ubicación excelente cerca de la calle comercial. La habitación era amplia, limpia y tenía una cama matrimonial muy cómoda.La habitación que nos ofrecieron era superior a la que habíamos reservado, con cafetera y bañera de hidromasaje.El personal del hotel fue muy amable y servicial, especialmente Atilio y Pepa.Fue reconfortante alojarse en una habitación executive, con unas vistas hermosas a la montaña.La relación calidad-precio fue muy buena.La limpieza del hotel fue impecable, reponiendo gel diariamente.

Lo viví como una verdadera escapada, no tengo ninguna pega.

Personal amable, habitación correcta con detalles incluidos, cafetería disponible todo el día, parking atento, buena presión de la ducha. Muy bien en general y limpio. Buena opción en Andorra.