Mi estancia en el O11 Boutique Hotel fue fabulosa. La ubicación es inmejorable, justo enfrente de la Ópera de Viena y cerca de todas las atracciones principales de la ciudad. La habitación en la que me alojé era amplia, limpia y con todas las comodidades necesarias. El desayuno era rico y variado, con todo lo necesario. Quiero destacar especialmente la amabilidad y ayuda del personal de recepción, especialmente Harold, quien nos ayudó con las entradas a los principales palacios y nos recomendó lugares para comer asequibles. En resumen, recomendaría este hotel para disfrutar de Viena. Es una excelente elección.

Las habitaciones son nuevas pero un poco pequeñas.

El hotel está muy bien ubicado, en pleno centro de la ciudad. Además, está cerca del teatro de la ópera y de la estación de metro. Las habitaciones son amplias y modernas, y el personal de recepción ofrece una excelente atención.

El único inconveniente es que el bacon del desayuno se les quemó los tres días que estuvimos hospedados.

Excelente ubicación junto a la Ópera y el metro. Habitación gigante con vista al edificio. Personal amable y dispuesto a dar indicaciones y recomendaciones. Desayuno diverso y abundante. Buena relación calidad/precio.

Ubicación perfecta, vistas espectaculares, habitación amplia y confortable, desayuno completo y de calidad, personal amable y atento.

Nada de verdad.

La ubicación en el centro de la ciudad, cerca de los principales lugares de interés y junto al metro. El hotel es muy limpio y las instalaciones son de primera categoría. El desayuno es fantástico, variado y abundante. Además, el personal es muy amable y servicial.

Nada, todo fue maravilloso.

Nos hospedamos en un hotel boutique en una excelente ubicación en el centro de la ciudad, cercano al transporte público. Las habitaciones eran amplias, limpias y confortables, con una decoración cálida. El personal de recepción fue muy atento y amable, haciendo que nos sintiéramos cómodos en todo momento. Además, disfrutamos de un completo desayuno con productos de calidad.

Algunas habitaciones no contaban con aire acondicionado, lo cual resultó incómodo durante los días de altas temperaturas.

Sin duda, lo mejor del hotel es la atención del personal, en especial Harold, que resuelve todo con una sonrisa y buena onda. Nos dieron un upgrade a una habitación enorme con balcón y una vista maravillosa a la ópera. El desayuno es completísimo y de muy buena calidad. La ubicación también es inmejorable, con todo cerca. Todo en general es espectacular y muy recomendable.

Es difícil mencionar algo negativo 😔

Excelente ubicación al lado de la Ópera de Viena y el metro. Personal amable y dispuesto a dar indicaciones y recomendaciones.- Habitación gigante con excelente vista hacia la Ópera.- Muy buen desayuno, diverso y abundante.

Para ser sincero, nada que no me haya gustado.

La ubicación cerca de muchos restaurantes y al lado del centro de la ciudad. El transporte es fácil ya que está muy cerca de todos los principales lugares de interés.El desayuno es delicioso y completo.El personal del hotel es amable y servicial.

No me puedo quejar de nada.

El hotel está situado justo en el centro, cerca de todo.

No hay nada malo que decir.

Obtuvimos una excelente relación calidad-precio y la habitación era muy buena. La ubicación del hotel era perfecta, ya que podíamos llegar caminando a todos lados y el personal del hotel fue muy amable y servicial.

Las opciones de desayuno podrían mejorar.

La ubicación perfecta para disfrutar de la ópera y el centro de Viena. El hotel, a pesar de ser antiguo, está muy bien cuidado y decorado con gusto. La habitación es amplia y confortable. El desayuno ofrece productos de calidad y las vistas a la ópera son espectaculares. Detalles como el agua y los bombones de bienvenida y el cava en el desayuno son agradables sorpresas. La relación calidad-precio es adecuada y el personal es atento y amable. Sin duda, un acierto de hotel.

Me sentí como acogido en una familia, no tengo ninguna queja.

Edificio antiguo pero bien cuidado y decorado con gusto. Habitación confortable y amplia.- Desayuno con productos de calidad y música clásica de fondo.- Detalles especiales como agua y bombones en la llegada y cava en el desayuno.- Personal atento y amable

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

La ubicación del hotel es excelente, justo en frente de la ópera de Viena y cerca de la calle más comercial. Las habitaciones están en perfectas condiciones, prácticamente nuevas. El personal es muy amable y se esfuerza por hablar en español, además de ofrecer recomendaciones sobre qué visitar y dónde comer.

Me sentí muy bien atendido, no tengo ninguna queja en absoluto.