La ubicación del hotel es conveniente, ya que está a poca distancia del centro, lo cual facilita explorar la ciudad. Además, las habitaciones son cómodas y cuentan con buen equipamiento. disfruté del desayuno tipo bufé, que ofrece una variedad de opciones para satisfacer a todos los gustos.

Encontré que la limpieza no estaba al nivel esperado. En nuestra habitación familiar, la cama de arriba de la litera no la habían hecho en los cuatro días que estuvimos allí.

Este hotel está en una zona muy buena, en un distrito muy tranquilo pero lleno de vida. Hay varios restaurantes cercanos y hasta un mercadillo de fin de semana. El personal es muy amable y atento. Las habitaciones son limpias y más grandes de lo esperado. Además, el desayuno es variado y sabroso.

Todo perfecto.

Buena ubicación, cerca de estaciones de metro y agradable paseo a plaza principal. Amplias habitaciones con cómodas camas. Calefacción alta, sin regulación. No hay caja fuerte ni armario, solo estantería abierta.

El hotel está en un barrio tranquilo, perfecto para descansar después de un día de turismo por la ciudad. Las habitaciones son cómodas y están equipadas con todas las instalaciones modernas necesarias. Además, se nota que se preocupan por la limpieza, ya que las habitaciones se mantienen muy limpias. Otro aspecto destacable es el buen desayuno que ofrecen, con muchas opciones para elegir.

Todo estaba ok.

El hotel está muy cerca del centro de la ciudad y de los medios de transporte público. Además, está ubicado en una zona residencial tranquila. Las habitaciones del hotel son grandes y cuentan con literas ideales para ir con niños. hay zonas de juego y una cocina y comedor compartidos. Además, el desayuno es muy completo y el personal de recepción es amable y atento.

En una de las habitaciones la cama extra era muy dura, lo que dificultaba el descanso.

Disfrutamos de todo en Meininger Hotel. La relación calidad/precio fue excelente. Estuvimos a poca distancia del centro y del tren hacia el aeropuerto. Incluso pudimos caminar al Prater en media hora. También había estaciones de metro cercanas, supermercados y lugares para comer. El personal de recepción fue muy amable y atento. Las habitaciones eran modernas, limpias y confortables. Además, había neveras con bebidas en el hotel, así como un billar y una zona de cocina para uso de los huéspedes. El desayuno fue abundante y variado.

No pude encontrar nada malo. 😊

Mi estancia en Meininger Hotel fue perfecta para pasar unos días en Viena. El personal de recepción fue muy amable y nos ayudó en todo momento, incluso guardando nuestras maletas y imprimiendo nuestras tarjetas de embarque. El hotel está ubicado en una zona tranquila, a solo 10 minutos a pie del centro y con una parada de metro cercana. Las habitaciones eran cómodas y limpias, con camas muy confortables. Además, todos los días cambiaban las toallas y el papel del baño. Fue un lugar ideal para descansar y explorar la ciudad.

De verdad que lo aconsejo.

La habitación era amplia y con una decoración moderna y simpática. Además, la cama era muy cómoda. La ubicación era perfecta, en pleno centro de la ciudad y cerca de lugares turísticos de interés. nos gustó mucho que tuviera una cocina de uso común y que el personal de recepción fuera muy amable. El desayuno tipo buffet continental tenía una gran variedad de opciones y el personal siempre estaba pendiente de reponer lo que se agotaba.

No había nada que no me gustara.

Este hotel está en una zona muy buena, tranquila y en el centro de la ciudad. El personal es muy amable y las habitaciones son cómodas y limpias. Además, el desayuno es delicioso y variado.

Todo estaba bien.

El hotel está muy bien ubicado, cercano al centro de la ciudad y cerca del metro. Además, cuenta con un restaurante y varias cafeterías cerca para comer. En cuanto a las habitaciones, son amplias y cómodas, con camas confortables. disponen de un baño limpio y sencillo. Además, el personal es atento y amable.La relación calidad/precio es buena, aunque el desayuno puede resultar caro.

Lo mejor de mi experiencia en este hotel fue el personal amable y atento, que hablaba varios idiomas y nos ayudó a llegar al centro de la ciudad. Además, la habitación era grande y estaba muy limpia. También me gustó mucho la relación calidad-precio del hotel, ya que estaba cerca del centro de la ciudad y tenía supermercados y restaurantes cercanos. Por otra parte, lo que menos me gustó fue que había algo de ruido por la mañana debido a las tareas de limpieza, pero no fue algo que afectara demasiado mi estancia. En resumen, tuve una buena experiencia en este hotel durante mi viaje de negocios.

Mi estancia en el Meininger Hotel fue bastante buena. Aunque no tenía aire acondicionado en la habitación, había dos ventiladores pequeños que ayudaron a refrescar el ambiente. La zona del hotel es fantástica, llena de vida y con varios restaurantes cerca. Las camas eran cómodas y la habitación familiar tenía suficiente espacio para los cuatro. me gustó poder usar la cocina del hotel. El personal era muy amable y servicial. En general, recomendaría este hotel.

Lo único negativo fue que en los días de calor fue un poco incomodo no tener aire acondicionado. Además, las habitaciones y la decoración del hotel mostraban signos de desgaste.

El hotel se encuentra en una zona residencial tranquila y está cerca del centro de la ciudad. Además, está convenientemente ubicado cerca de dos estaciones de metro, lo cual facilita el traslado por la ciudad. Las habitaciones son espaciosas y cuentan con todas las comodidades necesarias para una buena estadía. Por ejemplo, hay máquinas expendedoras de bebidas y comida, así como una cocina bien equipada.

El personal de recepción no habla español.

Me encantó todo de este hotel. La relación calidad-precio es inigualable. Está situado en un barrio tranquilo, lo que garantiza una estancia tranquila y sin ruidos. Además, cuenta con todas las instalaciones modernas que necesitas, incluyendo literas en las habitaciones. El desayuno está incluido en el precio y ofrece una amplia variedad de opciones frías deliciosas. me gustó que el personal fue muy amable y atento durante toda mi estancia. Definitivamente volvería a este hotel por estas razones y más.

Todo estuvo perfecto.

Excelente opción para hospedarse cerca del centro de la ciudad. El hotel está a solo tres cuadras de una estación de metro, lo que facilita desplazarse por Viena. Las instalaciones son modernas y limpias, las habitaciones son amplias, cómodas e iluminadas. Además, el Wifi es bueno y el desayuno es rico y completo. Sin duda, lo recomendaría.

No hay caja fuerte en la habitación y no cuenta con un armario tradicional, solo una estantería abierta para guardar la ropa.