Hotel Josefshof Am Rathaus ofrece una ubicación conveniente, cercana a numerosos lugares turísticos, restaurantes y tiendas. El personal amable y profesional brinda un excelente servicio. Las habitaciones son espaciosas, con detalles elegantes y comodidades como una cafetera con cápsulas y calefacción regulable. El desayuno es variado y de alta calidad, con una amplia selección de alimentos frescos. Aunque no hay restaurante, el servicio de habitaciones básico es útil. La única desventaja es la falta de vistas panorámicas. En general, una opción perfecta para los viajeros de negocios.

Me sentí como en casa en este hotel moderno y bien decorado. El desayuno era muy completo, con bollería, fruta, pan y zumo de naranja natural. La ubicación era perfecta, cerca del centro y con fácil acceso al transporte público. La amabilidad del personal y la comodidad de la habitación fueron destacables. Además, el hotel ofrecía café, té, agua y bollería gratis durante todo el día.

Me sentí como si me trataran como a un rey, no tengo ninguna queja.

Estuve hospedado en un hotel muy bien situado, cercano a muchos lugares turísticos. Además, estaba en el barrio de los museos, lo cual fue muy conveniente para mi visita cultural. La habitación era amplia y acogedora, con todas las comodidades necesarias. El desayuno era bastante variado y de buena calidad. El personal del hotel fue amable y profesional en todo momento.

Además, no me informaron sobre la tasa ciudadana y me sorprendieron con el pago al momento del check out. Por último, me molestó que me cobraran por las consumiciones en la habitación sin previo aviso de los precios.

Josefhof Am Rathaus fue una excelente elección para nuestra estancia en Viena. El hotel cuenta con habitaciones cómodas y amplias, y el personal es increíblemente amable y atento. El desayuno ofrecía una gran variedad de opciones frescas, como frutas, yogur, tortas, fiambres y huevos. Además, nos encantó que se incluyera champán en el desayuno. La ubicación del hotel también fue conveniente, con acceso fácil al transporte público y a solo unos 15 minutos a pie del centro de la ciudad.

Ninguna queja. 😊

El hotel estaba muy limpio y tenía todas las facilidades necesarias. La ubicación cercana al centro de la ciudad fue ideal, ya que pudimos ir andando a todos los lugares de interés principales. Además, el hotel estaba cerca del metro y de una parada de tranvía, lo cual facilitó nuestro transporte por la ciudad. El desayuno fue delicioso y el personal fue muy amable y atento.

De verdad no hay nada que no nos haya gustado.

La ubicación del hotel es excelente, muy cerca de los principales puntos de interés de la ciudad. Además, hay una estación de metro cercana, lo cual facilita el transporte. Otro aspecto destacable es la amabilidad del personal, siempre dispuesto a ayudar.

No pudimos disfrutar de una buena conexión wifi durante nuestra estancia, lo cual fue bastante molesto. También encontramos que el desayuno no cumplió nuestras expectativas, con poca variedad y productos de baja calidad.

disfrutamos de nuestra estancia en viena. el hotel josefshof am rathaus fue una elección acertada. la ubicación era perfecta y la habitación era cómoda y espaciosa. nos sentimos muy bien atendidos por el personal amable y servicial. definitivamente volveríamos a hospedarnos aquí en nuestro próximo viaje a viena.

el ascensor era lento

Ubicación ideal, cerca de atracciones principales y transporte público. Calle tranquila sin ruido. Personal atento y multilingüe. Habitación acogedora y bien cuidada. Buena variedad en el buffet. Esperamos volver.

Limpieza impecable, comodidad de la cama, hermosa decoración de Klimt, baño confortable con calentador de toallas, estantería práctica, televisión grande.

Sin problemas.

El Hotel Josefshof Am Rathaus está en una ubicación privilegiada en Viena, cerca del centro y de todos los museos. El personal es amable y accesible, especialmente el Sr. Hartmann, quien nos recibió de manera excepcional. Las habitaciones son confortables y tienen detalles como cafetera y albornoz. La limpieza es buena.

Me encantó la ubicación del hotel, estaba cerca de todas las atracciones principales y se podía ir caminando a todas partes. Además, había una estación de metro cercana, lo cual era muy conveniente. También me gustó mucho el personal, eran muy amables y serviciales.

Una de las mejores cosas de este hotel fue su ubicación en el centro de la ciudad, cerca del parlamento y en una zona maravillosa. Además, nos encontramos con un hotel increíblemente limpio y con instalaciones de calidad. El personal también fue extremadamente amable y servicial.

No hay nada que no nos haya gustado.

Personal amable y atento, desayuno bueno y variado, habitación con baño y cama cómoda. Cerca de museos y transporte público. Calle tranquila.

La habitación era muy pintoresca y estaba impecable. Había shampoo y jabones de dispenser, lo que es más amigable con el medio ambiente. La ubicación era excelente. La relación precio-calidad era muy buena, nos dieron un alto cuarto por un buen precio. Tenían la opción de after tea, donde podías merendar de forma gratuita en un lindo patiecito.

Me sentí como si me trataran como a un rey, no tengo ninguna queja.

mi experiencia en viena fue buena, pero mi visita breve en hotel Josefshof Am Rathaus fue memorable. la habitación amplia, limpia y con una decoración clásica me encantó. el baño moderno y la cama muy cómoda garantizaron un descanso perfecto. la ubicación cercana al centro de la ciudad fue genial y el personal amable y servicial hizo que me sintiera muy bienvenido.

El wifi se desconectaba a veces.