El hotel donde nos alojamos en nuestro viaje a una pintoresca ciudad belga fue una elección perfecta. Está ubicado en el centro mismo de la ciudad, a solo unos pasos de la plaza principal. Además, nos impresionó mucho la atención al detalle y el moderno diseño del hotel. Las habitaciones eran limpias y funcionales, con una terraza privada que añadía un toque especial. El desayuno incluido era delicioso y variado, y el personal era amable y servicial. nos gustó que las habitaciones contaban con aire acondicionado para mayor comodidad. En resumen, este hotel ofrece una excelente relación calidad-precio y sin duda lo recomendaría a cualquiera que visite esta encantadora ciudad belga.

No encontramos ninguna queja durante nuestra estancia en este hotel.

Situado al lado de la plaza principal, habitaciones amplias con cocina, desayuno completo.

La ubicación del hotel Marcel era perfecta, en pleno centro de la ciudad, cerca de la plaza principal. Además, las habitaciones eran amplias y estaban decoradas con mucho gusto. destacaba el desayuno, que aunque no era supervariado, era muy bueno.

Había un pequeño detalle que no nos gustó: el ruido de la calle se escuchaba en las habitaciones, especialmente en las ventanas.

Desayuno excelente. Ubicación céntrica. Personal amable. Renovación con buen gusto. Diseño interior práctico. Recomendable 100%.

Nada, todo es maravilloso.

Desayuno excelente. Ubicación perfecta. Vistas preciosas. Habitación bonita. Cama cómoda. Amabilidad del personal. Bus gratuito.

Nada, todo estuvo bien.

El personal del hotel Marcel fue muy amable y comprensivo. Llegamos tarde desde Amsterdam, pero nos esperaron. Incluso nos prepararon el desayuno cuando nos equivocamos y bajamos media hora antes. La ubicación del hotel es céntrica y puedes aparcar cerca. Recomendaríamos este hotel sin duda.

Nada, todo estuvo bien. 😊

Mi estancia en el hotel Marcel fue simplemente maravillosa. La habitación estaba impecable y llena de detalles encantadores. El personal de recepción fue amable y atento, y me sentí muy bienvenido desde el momento en que llegué. Además, la ubicación del hotel era perfecta, a solo unos minutos de la plaza principal de Brujas.

Aunque hubo algunos contratiempos menores, como un olor desagradable en el baño, estoy seguro de que fue algo puntual y no afectó en gran medida mi experiencia en el hotel.