Me encantó el estilo antiguo, amplios espacios y el desayuno estuvo bien. La cocina muy limpia y amplia. La habitación limpia así como el baño. Es lo más importante para mí. Decoración e iluminación excelentes. Habitaciones grandes y acogedoras. Sensación de libertad y cuidado para los pasajeros. Camas cómodas, pisos de madera y mobiliario con detalles interesantes como los grandes sillones de cuero, mesas ratonas y la colección de lámparas de papel, un hallazgo. Duchas muy buenas. Ubicación muy cómoda para ir caminando a los sitios de interés. Estadía diferente y muy recomendable. Volvería a ir.

Me sentí realmente como en casa, no tengo ninguna pega.

Tener acceso a una piscina en pleno verano es sin duda lo máximo! Además, el staff fue muy amable y en especial Natalie. El desayuno es delicioso y hacen huevitos a tu gusto. Los espacios comunes son amplios y las habitaciones son cómodas y amplias. Si te gustan las casas antiguas, con historia, éste es el lugar!

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna queja en absoluto.

La ubicación es genial, ya que está en una calle tranquila y cercana al centro de la ciudad. Además, se encuentra cerca de una estación del metro, lo que facilita el transporte. El personal es muy amable y siempre dispuesto a ayudar. Las instalaciones del hotel son excelentes, especialmente la terraza con piscina y zona exterior. El desayuno es completo y la limpieza es impecable.

No tengo nada negativo que decir.

Me gustó mucho la ubicación del hostel, ya que estaba cerca del centro de la ciudad y de las principales vías de transporte. Además, pude disfrutar de un completo desayuno que ofrecían, con muchas opciones para elegir. Por otro lado, el personal fue muy amable y atento durante toda mi estadía.

Hubo algunos aspectos que no me gustaron. En primer lugar, la falta de agua caliente en el tercer piso durante dos días seguidos fue bastante incómodo.

Me encantó la ubicación en el centro de la ciudad, cerca de la Plaza de Armas y el Palacio de la Moneda. Además, el barrio es realmente agradable y la estación de metro está tan cercana.

Me hubiera gustado que el hostel tuviera aire acondicionado o al menos ventiladores en las habitaciones, ya que hacía mucho calor durante mi estadía.

La ubicación es buena, a solo 20 minutos a pie del centro, con fácil acceso al metro y autobuses hacia el aeropuerto. Cerca del animado barrio Brasil, lleno de bares y restaurantes. Personal amable y servicial. Terraza agradable y cocina común disponible.

Me sentí muy acogido, no he tenido ningún inconveniente.

Nos encantó la comodidad de las instalaciones, así como la ubicación céntrica del hotel en un bonito barrio. El desayuno fue delicioso y el personal fue amable y atento. apreciamos la disponibilidad de la cocina, a pesar de que a veces no estaba limpia debido al mal uso de otros huéspedes.

De verdad no hay nada que no nos haya gustado.

Me quedé en Happy House en Santiago de Chile y fue una experiencia fantástica. El edificio era hermoso y la habitación era amplia con un baño privado. El desayuno era bueno, aunque me hubiera gustado más opciones de dulces. La cama era cómoda y el servicio del personal fue excelente. Además, la ubicación cerca del metro Los Héroes fue muy conveniente.

los pisos del hostel rechinaban mucho, lo cual era molesto.

El desayuno y ubicación son geniales. Amplio pero necesita remodelación. Personal amable. El hotel es cercano a dos estaciones de metro, zona de restaurantes y supermercado. Cocina amplia y baños compartidos disponibles. Buena relación calidad/precio. Trato excelente, instalaciones hermosas con patio, pileta, cocina y sala de TV. Ubicación ideal cerca del transporte público y micro al aeropuerto. Estadía sin problemas.

Me encantó mi estancia en el Happy House Hostel. Fui a Santiago por motivos de viaje y me quedé allí durante una semana. Lo que más me gustó fue la ubicación del hostel, ya que estaba cerca de dos estaciones de metro que conectaban con otras dos. Además, había una gran variedad de pubs y restaurantes cerca, donde pude disfrutar de comida casera, china, peruana y japonesa. había un supermercado cercano, lo cual era muy conveniente. La cocina amplia fue otra ventaja, ya que pude preparar mi propia comida. Aunque los baños eran compartidos, había varios disponibles, lo que nunca causó problemas. La disposición del personal y las instalaciones en general también fueron excelentes, pudiendo utilizar todas las áreas sin ningún inconveniente, incluyendo la cocina en el segundo piso, la terraza, el patio y el interior del hostel. La tranquilidad del lugar y la libertad de poder seguir utilizando las instalaciones después de hacer el check-out también fue algo que realmente aprecié. La calefacción fue muy efectiva, especialmente durante estas bajas temperaturas.

pasamos una estancia increíble en santiago, el Happy House superó nuestras expectativas. Las camas eran cómodas, las sábanas suaves y la habitación contaba con mucha luz natural. Además, disfrutamos de los espacios comunes tanto dentro como fuera del hostal. El personal fue muy amable y la ubicación era perfecta, cerca de restaurantes y atracciones turísticas.

faltaba un poco de confort en las habitaciones compartidas.

Mi estadía en el hostel fue excelente. El personal era muy amable y atento. La habitación individual en la que me hospedé era acogedora, limpia y cómoda. La ubicación del hostel era perfecta, cerca de varios puntos de interés y con restaurantes cercanos para disfrutar de una deliciosa comida. A pesar de algunos pequeños inconvenientes, como una conexión a internet intermitente y el ruido de las habitaciones que dan a la calle, recomendaría este hostel en Santiago. En general, recomendaría este hostel para una estadía agradable y conveniente en Santiago.

La primer noche en Happy House Hostel fue una experiencia positiva. Llegamos tarde y estábamos ansiosos por descansar, y para nuestra alegría, la cama era muy cómoda con sábanas suaves. Además, nos asignaron una habitación con buena iluminación natural que nos hizo sentir más frescos y enérgicos. La amplitud del hostel, siendo una casa antigua de madera, tenía un encanto único y los espacios comunes tanto interiores como exteriores eran muy agradables.

Hubo un inconveniente con el wifi durante la primera noche, pero cuando notificamos al personal, el problema se solucionó rápidamente al día siguiente. También, nuestra habitación estaba cerca de un balcón donde las personas se reunían en grupo y esto generaba ruido que interrumpía nuestra tranquilidad.

Me gusta que la ubicación del establecimiento es muy conveniente, cerca de Fantasilandia, La Casa de la Moneda, la peatonal, bares y transporte a solo dos cuadras. El desayuno es bueno y el servicio también. Es un lugar lindo para relajarse y luego salir a disfrutar, y volver a descansar. La cocina en el segundo piso es muy útil para preparar almuerzo y cena, lo que ayuda a ahorrar dinero en comer fuera. La calefacción es excelente, especialmente en esta época con las temperaturas tan bajas.

Me sentí como si estuviera relajándome en casa, no me puedo quejar.

El personal es amable. El lugar está bonito y cerca de todo. Hay restaurantes cercanos. El hostel tiene buena infraestructura y está limpio. La ubicación es conveniente, cerca del metro.