Me encantó hospedarme en el Islander House. Pasé una semana en este hermoso hotel boutique y fue perfecto para una escapada romántica en pareja. Lo mejor de todo fue la amabilidad y atención de Ara, la encargada de preparar los deliciosos desayunos y mantener impecables las habitaciones. Además, la tranquilidad del lugar, al tener un número reducido de habitaciones, hizo que nuestra estancia fuera aún más placentera. Y lo más sorprendente fue tener una entrada directa al mar en la playa de Rocky Cay, donde podías caminar varios metros mar adentro sin dejar de tocar el suelo. Sin duda, las instalaciones no eran lujosas, pero brindaban una cálida sensación de hogar. El Islander House cumplió con todas nuestras expectativas y la atención que recibimos fue excelente. De verdad que lo recomiendo.

la ubicación cerca de la playa, el desayuno incluido y el personal agradable y atento. Además, la habitación era cómoda con una cama grande y la decoración era agradable. También disfruté del clima agradable durante mi estadía en navidad.

La falta de aire acondicionado, ya que solo había ventiladores que estaban sucios y decidimos no usar. Además, el ruido de otros huéspedes en la casa de madera era incómodo, ya que se escuchaban todos los pasos.