Atención impecable. Delicioso desayuno y comidas a buen precio.3. Senderos bellísimos en el bosque para caminatas.4. Lugar para desconectarse y relajarse.

No hay nada malo que decir.

Personal atento, paisaje hermoso, caminata exigente pero relajante, buena alimentación y acceso limitado a provisiones, wifi limitado pero perfecto para desconectar del mundo real.

Nos encantó la ubicación frente al mar y la paz que se respira en medio de la selva. Las cabañas son acogedoras y están bien equipadas. Además, el personal es amable y la comida deliciosa.

Podrían mejorar la variedad de alimentos y opciones de bebidas disponibles en el comedor común.

El ambiente rústico entre los árboles y la vista espectacular frente al mar. La tranquilidad y la playa exclusiva. Personal fantástico y atento.

Me sentí completamente relajado, no tengo ninguna razón para quejarme.

Mi experiencia en Ecolodge Playa Brava Teyumakke fue realmente reconfortante. Tuve la oportunidad de estar en pleno contacto con la naturaleza, rodeado de hermosos paisajes. El alojamiento era paradisiaco, con camas cómodas y sin mosquitos gracias a las mosquiteras. Además, la comida estaba deliciosa y nos ofrecieron agua filtrada de la cascada. El personal fue muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. pude disfrutar de las estrellas y de un amanecer espectacular. En resumen, recomendaría este ecolodge a cualquiera que busque un ambiente tranquilo y natural.

Por un lado, me pareció que la comida era bastante costosa en comparación con otros ecohoteles similares y de mejor calidad.

Experiencia positiva en un lugar paradisíaco con atención excepcional, comida deliciosa y ubicación impresionante. Sensación de estar en casa y conexión directa con la naturaleza. En general, una experiencia encantadora que espero repetir pronto.

Nos encantó todo en este lugar. Desde la playa hasta el servicio, todo fue espectacular. El personal fue muy amable y nos recibieron con limonada. Las cabañas estaban limpias y equipadas con mosquiteros. El colchón era cómodo y las sábanas y toallas estaban limpias. Además, teníamos agua y tapetes para limpiarnos los pies de la arena. había dos pequeños ríos que llegaban al mar y una cascada espectacular a 35 minutos de distancia. La comida, aunque un poco repetida debido a la lejanía del lugar, estaba deliciosa.

Ubicación privilegiada. Comida deliciosa. Personal amable. Cabañas limpias con mosquiteros. Playa y cascada hermosas.

El alojamiento en Ecolodge Playa Brava Teyumakke fue paradisiaco. Muy poca gente allí por el difícil acceso. Pero mucha tranquilidad. Las camas eran muy cómodas y no había mosquitos gracias a las mosqueteras. Estábamos en frente del mar, con una vista única. La comida estaba deliciosa y nos proporcionaron agua filtrada de la cascada para rellenar nuestras botellas. El personal fue súper amable. Además, se podían ver perfectamente las estrellas y disfrutar de hermosos amaneceres.

Nada malo 👌🏼.