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Es difícil mencionar algo negativo.

Las instalaciones son excelentes y el lugar es mágico. La comida es deliciosa y de excelente calidad. El personal es muy atento y servicial.

Me sentí muy afortunado de haber encontrado este lugar, no tengo ninguna queja en absoluto.

Las instalaciones son excelentes y el lugar es mágico. El personal es servicial y atento, brindando una atención personalizada. La oferta gastronómica es muy buena y de excelente calidad. El contacto con la naturaleza es una experiencia maravillosa, con senderos, ríos, puentes, cascadas y un hermoso jardín de colibríes. Además, se aprovecha lo local con productos como café, dulces y diseño. Todo esto crea una atmósfera mágica y excepcional.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna queja en absoluto.

El lugar es un paraíso para desconectar de la ciudad y relajarse en medio de la naturaleza. El personal es muy amable y atento, te hacen sentir como en casa. Las instalaciones y cabañas están equipadas con todo lo necesario, incluyendo jacuzzi privado. La comida es deliciosa y se utiliza ingredientes orgánicos producidos en el hotel. Además, las actividades como la caminata a las cataratas y el paseo en bicicleta son experiencias únicas y recomendadas.

La carretera que conduce al hotel puede ser un poco peligrosa.

El lugar ofrece un ambiente tranquilo y aislado, ideal para descansar y desconectar de la rutina diaria. Las cabañas son amplias y recién remodeladas, brindando comodidad y frescura. Además, el servicio de restaurante es sobresaliente, con una deliciosa y orgánica comida. El personal se destaca por su amabilidad y atención, haciendo que los huéspedes se sientan especiales y como en casa.

No cuentan con calefacción en las cabañas, lo cual puede ser incómodo durante las noches frías.

El paisaje es impresionante, estar rodeado de montañas y selva crea una experiencia única. La habitación es muy cómoda y acogedora, perfecta para relajarse después de explorar la naturaleza circundante. El personal es excepcional, siempre dispuesto a ayudar y hacer que tu estadía sea inolvidable. Aprovechar los productos locales, como el café y los dulces, le da un toque auténtico y delicioso. Además, el restaurante ofrece una comida de alta calidad y el servicio de concierge te ayuda a encontrar actividades interesantes.

Mi experiencia en El Silencio fue simplemente mágica y excepcional. Desde el momento en que llegamos, el personal nos trató de forma excelente, cuidando todos los detalles y brindándonos una atención personalizada. Los senderos, ríos y cascadas nos permitieron conectarnos con la naturaleza, mientras que la comodidad de la habitación y los pequeños detalles como el chocolate y las galletas nos hicieron sentir realmente mimados. Además, la deliciosa comida del restaurante y el servicio de concierge experto en buscar actividades interesantes nos dejaron encantados. Sin duda, uno de los mejores lugares que he visitado.

Casi perfecto. 😊

El personal es excelente, atento y servicial. La comida es deliciosa y se destaca la utilización de ingredientes locales. Las instalaciones son cómodas y cuentan con un jacuzzi en la cabaña. El contacto con la naturaleza es increíble, con senderos, río, cascadas y jardín de colibríes. La atención y los detalles brindan una experiencia mágica.

Pasé una estancia espectacular en El Silencio. El personal fue supremamente atento y se esmeró en brindarme una buena experiencia. El restaurante es de una calidad indiscutible y la belleza natural del lugar es impresionante. El servicio de concierge encontró actividades interesantes para hacer y me encantó el detalle de dejarme un delicioso postre en la habitación al final del día. Ideal tanto para familias con niños como para jóvenes con ganas de acción.

mi última visita a Toro Amarillo fue inolvidable, pero El Silencio Lodge&Spa superó todas mis expectativas. El personal fue excepcional, atento y se encargó de cada detalle para que mi cita fuera mágica. Desde la atención personalizada hasta la increíble conexión con la naturaleza, todo fue simplemente perfecto.

La carretera al pueblo no fue ideal.

Me encantó estar rodeado de naturaleza y disfrutar del hermoso paisaje. La habitación era muy cómoda y acogedora, me sentí como en casa. Además, el personal fue sumamente atento y se esforzó por brindarme una excelente estadía.

Aunque el menú era bastante limitado, esperaba una mejor relación calidad-precio. Además, me hubiera gustado que el personal fuera más cálido y me hiciera sentir como en casa.

¡Deliciosa comida! El personal atento y servicial. Cabalgata, cataratas, jacuzzi, cómoda cama, vista espectacular, sonido de pájaros.

Me sentí muy relajado, no he tenido ningún inconveniente.

El personal del lodge es muy atento y servicial, siempre dispuestos a ayudar. La oferta gastronómica es excelente, con comida de alta calidad. Las instalaciones son excelentes, creando un ambiente mágico. Ideal para familias con niños o personas que buscan acción.

Me sentí privilegiado, no he tenido ningún inconveniente.

Elegí El Silencio para celebrar el compromiso con mi pareja y todo fue perfecto. El personal fue excelente, cuidó todos los detalles y brindó atención personalizada. El contacto con la naturaleza, los senderos, el río, los puentes, las cascadas y el jardín de colibríes crearon una atmósfera mágica. Además, la comodidad de la habitación, con chocolates y galletas, y los muebles acogedores fueron destacables. El aprovechamiento de productos locales, como el café, los dulces y el diseño, también hizo que la estadía fuera excepcional. En resumen, fue una estancia espectacular.

Puedo recomendar este hotel a todos.

Me quedé con un grupito de patas en las villas de dos habitaciones y fue la mejor elección. Teníamos espacio de sobra para todos y la comodidad era de primera. Las sendas del hotel eran súper chivas, rodeadas de pura naturaleza y llenas de pajaritos cantando. No había tiempo para aburrirse. ¡Y el villa de tres habitaciones era como puro lujo, mae! Ideal para pasarla con la family o un grupito grande de amigos. Si buscás un lugar premium para jamear y pasarla bien, definitivamente tenés que venir aquí. ¡De lujo, mae!

La única cosilla que podríamos pedir es más diversión para los que somos un poco más jariosos, ¿sabés? Yo y mis panas somos a toda máquina y nos gustaría tener más actividades más prendidas para disfrutar en el hotel.