Me encantó mi experiencia en este hotel durante mi navidad en Praga. Lo que más me gustó fue la amplitud y comodidad de la habitación, así como el excelente baño con ducha. También disfruté de la cama cómoda con diferentes opciones de almohadas. La ubicación del hotel era perfecta, cerca del centro pero en una zona tranquila. Además, el desayuno era delicioso y variado, con una buena presentación de los alimentos.

Hubo algunos aspectos negativos. También noté que la habitación tenía un poco de polvo, especialmente en la moqueta.

Nos alojamos en este hotel durante 4 días y quedamos encantados con nuestra estadía. La relación calidad-precio es excelente. Aunque no está ubicado en el centro turístico, es fácil llegar gracias a la parada de autobús desde el aeropuerto que se encuentra a solo 100 metros del hotel. También hay varias opciones de comida y un centro comercial en los alrededores. El desayuno en el hotel es magnífico, con una gran variedad de opciones deliciosas. La habitación era amplia y confortable, y el baño era moderno y funcional. Además, hay muchas opciones de restaurantes cerca y dos grandes centros comerciales a poca distancia.

Aunque no tengo nada negativo que decir sobre mi estadía en general, hay algunos detalles que podrían mejorar. La cortina en la habitación no cubre completamente la luz, por lo que si eres sensible a la luz al dormir, es algo a tener en cuenta al elegir este hotel.

La estancia ha sido genial. Buena ubicación y conexión en tranvía. Hotel tranquilo, habitaciones confortables y limpias. Desayuno variado y bueno. Empleados serviciales.

Nada obvio.

La ubicación es muy conveniente, cerca del centro de la ciudad y de los principales lugares de interés. Además, está cercano a la estación de tranvía, lo que facilita el transporte. Las habitaciones son amplias y cómodas, con un baño espacioso y moderno. El servicio es amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. El desayuno buffet es variado y de buena calidad, con una presentación impecable.

El único aspecto negativo es que algunas habitaciones no tienen una vista panorámica de la ciudad.

el hotel Orea superó mis expectativas durante mi estancia en Praga. La ubicación era excelente, muy cerca del metro y de zonas de ocio como cines, restaurantes y mercados. Además, el personal fue muy amable y el wifi era potente.

Fue un detalle que no nos gustó y que no estaba especificado en su página web.

la amabilidad del personal y las comodidades de la habitación fueron excepcionales durante nuestro último viaje a Praga. La ducha era deliciosa y cómoda, el desayuno generoso y el personal siempre dispuesto a ayudar. Fue el mejor hotel en el que nos hemos hospedado en Europa del Este. ¡Lo recomiendo y me encantaría volver!

El aire acondicionado y la calefacción podrían ser más potentes, para que los huéspedes puedan tener la temperatura exacta que deseen en todo momento. También sería genial si la televisión tuviera conexión a internet para poder ver series y películas durante la estancia.

El hotel cuenta con una excelente limpieza y unas instalaciones fantásticas. Además, su ubicación es perfecta, ya que está cerca de la estación de metro y de los medios de transporte público. También se encuentra cerca del centro de la ciudad, lo que facilita ir y venir del aeropuerto. El desayuno es delicioso y variado, y el personal del hotel es amable y atento.

Nada.

Muy cerca del metro y de zonas de ocio, cines, restaurantes y mercados. Ubicación excelente. Wifi potente. Personal muy amable. Comida checa buenísima y baratísima. Habitación amplia, con cama grandísima y mucho espacio. Buena variedad en el desayuno. Buena oferta de restaurantes cerca.

Cama comodísima

Imposible encontrar algo.

La estancia ha sido genial. Muy buena ubicación y conexión en tranvía con el centro en tan solo 10 minutos. El hotel es muy tranquilo, sin ruidos y las habitaciones muy confortables y limpias. El desayuno es muy variado y bueno. Los empleados son muy serviciales. Lo que más me gustó fue que la habitación tenía una cama grandísima y mucho espacio para dejar las cosas y moverte sin tropezarte con ellas. La comida del menú checo estaba buenísima y baratísima. Nos gustó todo mucho!

Recomendaría a todos este lugar.

La habitación amplia y cómoda, con un baño estupendo y una cama cómoda con almohadas diferentes. El desayuno es completo y variado, y el personal del desayuno es muy agradable. Hay bares con música en directo y actividades en el río, que está al otro lado a unos 20-25 minutos andando del puente Carlos. El hotel es moderno y está ubicado en un lindo barrio no turístico pero cerca del centro. Tiene un aparcamiento de pago, y se puede pagar en euros.

Estuve muy feliz, no tengo ninguna pega.