El hotel está ubicado en un barrio tranquilo, rodeado de un jardín encantador. Además, está cerca de muchos lugares de interés turístico y a poca distancia de varios destinos populares. Las habitaciones son amplias, con decoración exquisita y equipadas con tecnología moderna, como tablets para controlar todo. El baño es espacioso, con bañera y ducha separadas. El servicio es impecable, con personal atento y amable. Incluso ofrecen té de la tarde delicioso, con productos originales y de alta calidad.

El servicio en el restaurante Lili podría mejorar en términos de atención en las mesas.

Nos trataron como realeza desde que llegamos. Tuvimos una habitación con vista a la Torre Eiffel como obsequio por nuestro aniversario. El hotel es precioso, la comida deliciosa y el personal amable y atento sin ser agobiante. No puedo esperar para volver. Pruében el pan francés en el desayuno. es increíble y nos dieron la receta :-)

Nada obvio.

Habitaciones amplias y lujosas con tecnología avanzada. Restaurante y terraza impresionantes. Personal amable y atento. El desayuno es impresionante. Recomendado.