La ubicación cerca de la estación de tren y el centro histórico fue genial, facilitando nuestro acceso a los lugares de interés. El desayuno buffet era completo y variado por un precio razonable. Además, la habitación y el baño eran amplios y limpios, brindando comodidad. La recepción 24 horas y el personal amable fueron especialmente útiles al viajar con un bebé. Aunque la zona tenía algunos aspectos menos atractivos, como la presencia de locales de entretenimiento adulto, apreciamos la conveniencia de la ubicación cercana a los principales puntos turísticos de Múnich. Las instalaciones de relajación del hotel, aunque no se mencionan, contribuyeron a nuestra comodidad y disfrute durante la estancia, permitiéndonos descansar y recargar energías para explorar los encantadores lugares cercanos como el Lenbachhaus, la Iglesia de San Pedro y el Viktualienmarkt, lo que enriqueció nuestra experiencia familiar y creó momentos memorables de conexión.

el desayuno fue excelente y el personal muy amable. las habitaciones eran espaciosas y bien equipadas, con todo lo necesario y sin ruido externo. la ubicación cerca de la estación de tren permitió una buena movilidad y acceso rápido al centro histórico. incluso pudimos dejar las maletas en recepción después de hacer el check-out, lo cual fue de gran ayuda.

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