La playa es un paraíso, con tumbonas de lujo. oh, espera, ¡que hay que pagar por ellas! Pero la fiesta y el buenrollo con gente increíble hacen que valga la pena. ¡Los DJ's son una pasada!

El servicio de recepción me trató como si hubiera demandado a su abuela, ¡qué encanto!

La ubicación del hotel es fantástica, justo en la playa, lo que hace que disfrutar del mar sea súper fácil. Tienen servicio de transporte gratuito al aeropuerto, y eso es un plus genial. La atención del personal fue bastante buena en general, especialmente el equipo de limpieza que hacía un gran trabajo manteniendo todo impecable. Además, el bar tiene un ambiente agradable y la música es un acierto total para descansar y relajarse al borde del mar.

Por otro lado, el desayuno podría tener un poco más de variedad; se sentía un poco repetitivo después de unos días.

Disfruté de mi estancia aquí. La playa fue perfecta, y conocí a personas de todo el mundo. Los desayunos estaban tan buenos que casi no gasté en comida. A veces, me olvidaba que estaba en vacaciones porque los momentos de relax eran invaluables. La cama no era la más cómoda, pero bueno, si ligas, el dolor de espalda no importa. No me di cuenta de que la noche tiene su propio horario y no vine aquí para dormir, así que todo bien.