Habitaciones amplias y limpias, con baños espaciosos. Buena ubicación cerca de una estación de tren y a pocos minutos del metro. Desayuno variado y abundante. Personal amable y atento. Estacionamiento seguro y conveniente.

El hotel Da Vinci en Milán es realmente lujoso. Las habitaciones son excelentes: amplias, limpias y muy agradables, tal y como se muestran en las fotografías. El personal de recepción nocturna fue amable y servicial, y el personal del salón del desayuno fue muy profesional, especialmente Gabriel, quien nos brindó un cuidado especial a pesar de nuestra llegada tardía.

El hotel se encuentra en un vecindario poco atractivo, pero su ubicación junto a la estación de tren es muy conveniente. Además, está muy cerca de la estación de metro, lo que facilita el acceso a otros lugares de interés en el área cercana. Las habitaciones son amplias, luminosas y cómodas, con un diseño bonito y bien decorado. El personal ofrece un servicio amable y servicial, asegurándose de que las habitaciones estén limpias y ordenadas a diario.

Hubo algunas molestias durante el check out, ya que tuve que esperar en una fila de 10 minutos.

La habitación era más grande de lo esperado y las camas eran enormes y cómodas. El desayuno ofrecía una gran variedad de opciones y estaba delicioso. El personal del hotel fue amable y servicial. Aunque el hotel estaba un poco alejado del centro, había un tren cerca que te conectaba fácilmente con la ciudad. En general, recomendaría este hotel.

Mi estancia en Da Vinci fue excelente. Pasé una semana allí durante un viaje de placer. El desayuno era delicioso, con una gran variedad de opciones, y las camareras siempre estaban dispuestas a ayudar. La habitación era espaciosa y muy limpia, lo cual me hizo sentir muy cómodo. Además, la ubicación era perfecta, con fácil acceso al tren y al metro para explorar la ciudad. Sin duda, recomendaría este lugar a cualquiera.

Insisto, este lugar es super recomendado.

Las mejores cosas de este hotel fueron la limpieza impecable, las instalaciones modernas y el desayuno variado. Además, el estacionamiento gratuito y la conveniente ubicación cerca de la estación de metro hicieron que mi estancia fuera aún más cómoda.

Nada de nada.

Habitaciones limpias y ordenadas. Desayuno de calidad.- Parking amplio con guardia de seguridad.- Personal amable y atento.

Nada que decir.

Este lugar fue una grata sorpresa. A pesar de estar ubicado en una zona un poco deteriorada, el hotel ofrecía una gran comodidad y lujo. La habitación era muy amplia y cómoda, con todas las comodidades que uno podría desear. Además, el servicio de habitaciones fue impecable y siempre estuvieron dispuestos a ayudar en todo momento.

Si bien el hotel no está ubicado en una zona turística y puede resultar un poco deteriorada, esto no es un gran problema ya que se encuentra muy cerca de la estación principal de trenes.

Nos hospedamos en un hotel ubicado cerca de una estación de trenes, lo cual resultó muy conveniente para explorar la ciudad. La habitación era amplia, limpia y cómoda, con un baño espacioso y productos de higiene disponibles. Además, el desayuno ofrecía una buena variedad de opciones y el personal era amable y sonriente.

Los ascensores del hotel eran muy lentos, lo cual resultaba algo frustrante al tener que esperar varios minutos para poder bajar.

Este hotel es una excelente opción en todos los aspectos. La ubicación es muy conveniente, ya que la estación de tren está a solo 2 minutos de distancia, lo que facilita el acceso a Milán desde este lugar. El personal es muy educado y servicial, siempre dispuesto a ayudar y brindar información útil. Además, las habitaciones son cómodas y acogedoras, con todas las comodidades necesarias como aire acondicionado, secador de pelo y minibar. hay un bonito jardín donde uno puede relajarse y disfrutar del entorno tranquilo. En general, este lugar brinda una estancia maravillosa y agradable.

Recomendaría este hotel a cualquiera.

Habitación con cama extragrande

Ubicación cerca de línea de tren. Restaurante con platos perfectos.Atención excelente y tranquilo.Tamaño de la habitación.Cuarto de baño amplio.Desayuno decente.Parking vigilado

Durante mi estancia en el Hotel Da Vinci en Milán, aprecié la comodidad y modernidad de las habitaciones, equipadas con ropa de cama de primera calidad y un área de trabajo adecuada para mi laptop. Además, la conveniente ubicación del hotel, a solo 20 km del aeropuerto de Linate y con acceso directo al centro de la ciudad, fue perfecta para mi corta estadía de tránsito.

El único aspecto negativo que encuentro es la barrera del idioma, ya que el personal tenía dificultades para comprender el español. Aunque fue un problema menor, considero que en un hotel de esta categoría deberían contar con un personal más competente en idiomas para brindar un servicio completo a sus huéspedes.

El hotel está ubicado justo al lado de la estación de tren, lo cual facilita el transporte hacia el centro de la ciudad. Además, cerca del hotel hay una parada de autobús turístico. La habitación es amplia y cómoda, con un baño espacioso. El desayuno es variado y delicioso.

Las almohadas podrían ser más cómodas.

La ubicación del hotel es excelente, ya que está junto a una estación de tren. Además, se encuentra en una zona tranquila, lo que garantiza un buen descanso. Otra ventaja es que las habitaciones son amplias y confortables, y el baño también es espacioso. El desayuno ofrece una gran variedad de opciones, tanto dulces como saladas, y el personal del hotel habla varios idiomas, incluyendo español.

Aunque los ascensores son pequeños y a veces hay que esperar un poco para usarlos, esto no afecta en gran medida la experiencia general en el hotel.

El hotel está muy cerca de la estación de tren, lo cual es muy conveniente para moverse por la ciudad. La habitación era enorme y la limpieza fue impecable. Además, el desayuno estaba muy completo y variado. El personal del hotel fue amable y servicial.

No puedo encontrar nada malo.