Lo mejor de mi estadía en este hotel fue sin duda la increíble vista que tenía desde mi habitación. Estaba ubicado en un acantilado, lo cual hacía que las vistas de la costa fueran impresionantes. Además, el acceso a la playa era muy conveniente gracias al ascensor que tenía el hotel. Disfrutar del sol en las tumbonas y darse un chapuzón en la piscina era un verdadero lujo. También debo mencionar la atención del personal, siempre amables y dispuestos a ayudar en todo momento.

Hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. El hotel estaba un poco alejado del centro del pueblo, aunque caminando no era tanto, aproximadamente unos 10 minutos.

El hotel está perfectamente ubicado, bastante cerca del centro de la ciudad. Además, está justo en el acantilado, brindando unas vistas impresionantes del océano. Las habitaciones son encantadoras, con una decoración antigua pero muy bonita. El servicio es excelente, con un personal amable y atento. ofrecen un desayuno de primera calidad, con una gran variedad de opciones. Sin duda, es un lugar ideal para disfrutar de unas vacaciones relajantes junto al océano.

Algunos huéspedes han mencionado que en otros aspectos del hotel, como el servicio de restaurante, han tenido malas experiencias.

Las impresionantes vistas y ubicación junto al mar hacen de este hotel un lugar perfecto para disfrutar de la belleza de la costa. Las instalaciones del hotel, como su playa privada, terraza y piscina, son excelentes y brindan opciones para relajarse y disfrutar del sol. Tanto las áreas comunes, como el salón y el comedor, como las habitaciones, están decoradas con buen gusto y mantienen un alto nivel de limpieza. El personal del hotel es extremadamente amable y servicial, brindando un trato amoroso y atento a los huéspedes.

Nada que pueda disgustar.

Instalaciones increíbles, ubicación perfecta, vistas desde la terraza, playa privada y piscina excepcionales. Decoración elegante y atención al detalle.

Para ser sincero, nada que no me haya gustado.

Las instalaciones son impresionantes, con una decoración lujosa y hermosa. El personal es amable y servicial. La ubicación es perfecta, cerca del centro y de la marina. La habitación básica es antigua pero encantadora, con todas las comodidades necesarias. La playa privada y la terraza son maravillosas. Una estancia inolvidable.

Este lugar es realmente impresionante. La ubicación en primera línea de mar es simplemente perfecta. Puedes disfrutar de las vistas desde la terraza mientras tomas algo en el bar o te relajas en la piscina. Además, el personal es muy profesional y agradable, siempre dispuesto a ayudar. Hacen todo lo posible para que te sientas cómodo y bien atendido. También me encantó el servicio de habitaciones, ¡fue genial tener la opción de desayunar en la habitación! Y no puedo olvidar mencionar las comodidades de la habitación, como el aire acondicionado, la televisión de pantalla plana y el balcón privado. En general, este lugar ofrece una experiencia de lujo y confort que no se puede superar.

Recomiendo este hotel a todo el mundo.