Las instalaciones remodeladas, las vistas y el entorno encantador hacen de esta experiencia un crucero en tierra firme. El personal amable, desde el gerente hasta el equipo de recepción y restaurante. La comida de huertos propios es deliciosa. La piscina y el autobús atractivos.

Nos quedamos impresionados por la atención y servicio del personal. Las instalaciones del hotel son nuevas y las vistas desde la ubicación en la montaña son impresionantes. El desayuno ofrece productos de calidad y la piscina es perfecta para relajarse. Además, el hotel cuenta con un autobús que te lleva a los distintos puntos de interés de la costa.

Para ser sincero, nada que no me haya gustado.

Se nota que las instalaciones del hotel son antiguas, pero su ubicación en lo alto de la montaña ofrece unas vistas impresionantes del mar. Las habitaciones son pequeñas pero cómodas, con baños limpios. El personal del hotel es amable y siempre dispuesto a ayudar. El desayuno es completo y variado, con productos de calidad. Además, el hotel cuenta con una piscina y un restaurante con deliciosa comida casera.

El hotel está alejado de la costa y de los principales puntos turísticos, lo que puede resultar inconveniente a la hora de desplazarse.

Habitaciones bonitas y cómodas, ducha genial, servicio de piscina estupendo, desayuno con vistas al mar, autobús para puntos de interés.

Nada, todo fue perfecto.