La atención de Don Rafael. Habitaciones cómodas y limpias.Decoración única en todo el lugar.Comida de calidad a buen precio.Cielos estrellados desde la terraza.Grandes extensiones de tierra para jugar.Ideal para relajarse y disfrutar.Ambiente de paz y tranquilidad.

Para nosotros fue ideal.

Nos hospedamos en un lugar increíble, rodeado de montañas y con una ubicación privilegiada. La habitación era cómoda y limpia, con bonitos detalles en la decoración. El servicio fue excelente, el personal siempre atento y servicial. El desayuno fue delicioso, con una variedad de platos para elegir. Disfrutamos de las instalaciones, como la terraza para disfrutar de las vistas y la alberca para relajarnos.

El único inconveniente fue la falta de wifi para los huéspedes, aunque en general fue agradable estar desconectados.

¡Fueron cuatro maravillosos días de verdadero descanso en Hacienda de Santa Clara! Don Rafael, nuestro anfitrión, estuvo súper atento a los detalles. La comida casera y tradicional estaba deliciosa, y no tuvimos que salir del hotel. El mobiliario vintage y hermoso le da un toque impresionante al lugar. Sin duda, disfrutamos de la tranquilidad y nos sentimos consentidos por el personal servicial y amigable, incluyendo a la encantadora perrita Golden, Nena. Es un lugar perfecto para relajarse y estar aislado de todo, a tan solo 110 km de la Ciudad de México. ¡Una gran experiencia muy recomendable!

No pude encontrar nada malo 😊

El personal del hotel fue muy atento y amable durante mi estadía. Me sentí bienvenido desde el momento en que llegué y siempre estuvieron dispuestos a ayudarme con cualquier necesidad que tuviera. Además, las instalaciones del hotel eran cómodas y limpias, proporcionando un ambiente agradable para descansar después de un largo día de trabajo. aprecié la ubicación conveniente del hotel, ya que estaba cerca de las principales áreas comerciales y de negocios de la ciudad.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estancia. La conexión Wi-Fi en el hotel era bastante deficiente, lo que dificultaba el trabajo en línea y la comunicación con colegas y clientes.

Ibamos a ir a "pueblear" por las antiguas haciendas cañeras de Morelos y buscábamos un lugar bien localizado, y no pudimos quedar en un mejor lugar. Lo más valioso del lugar es Don Rafael, que se esmera en dar una atención de primera desde que uno se estaciona hasta que uno se va tranquilo de vuelta a casa, es un gran anfitrión y está siempre atento al detalle. Las habitaciones cómodas y limpias y la decoración de todo el lugar y de las áreas comunes no tiene igual. Solo desayunamos y cenamos pero a un precio excelente, la calidad de los alimentos es de primera y vasta. Nos tocaron noches sin luna así que los cielos estrellados desde la terraza o cerca de la alberca eran de lo más adecuadas para disfrutar con una copa de vino. Fuimos con niños y se divirtieron mucho no solo en la alberca sino corriendo y jugando por las grandes extensiones de tierra que tiene la propiedad. De verdad que ya lo anotamos como un lugar para volver, tal vez en la próxima ocasión solos para disfrutar, aún más, los paisajes.

Es difícil mencionar algo negativo 😕

La comida del hotel es deliciosa y muy completa, con menús bien seleccionados y ingredientes frescos. Las vistas desde este lugar son impresionantes, especialmente en los atardeceres.- La propiedad ofrece un ambiente tranquilo y aislado, ideal para relajarse y desconectar.- El hotel permite la entrada de mascotas, lo cual fue genial ya que pude viajar con mi perro y disfrutar de su compañía.- El personal del hotel, especialmente Rafael, fue muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudar y asegurarse de que mi estadía fuera agradable.

Es difícil recordar algo negativo sobre este hotel, ya que mi experiencia fue muy positiva.

Tranquilidad, comodidad, atención excelente. Alimentos caseros deliciosos.Desconexión, historia, atardeceres maravillosos.

Nada que no me haya gustado.

La limpieza del hotel era impecable y las instalaciones eran cómodas y bonitas. El desayuno estaba delicioso y el personal era muy amable. La ubicación entre montañas ofrecía una vista maravillosa y una tranquilidad perfecta para desconectarse del mundo.

Nada, todo fue maravilloso.

Me encantó el ambiente tranquilo y relajado que encontramos en este lugar. Los paisajes son simplemente impresionantes, especialmente los atardeceres desde la terraza. Además, el servicio de atención al cliente fue excelente, el anfitrión siempre estuvo atento a todos los detalles y nos hizo sentir como en casa. Otra ventaja fue la comida, que era de excelente calidad y a un precio muy justo. Sin duda, disfrutamos mucho de nuestra escapada romántica en este lugar especial.

Hubo algunos aspectos negativos que afectaron nuestra experiencia. El internet era escaso y poco confiable, lo cual resultó ser un inconveniente, especialmente si uno necesita estar conectado.

La comida es deliciosa, los menús son completos y hay opciones para vegetarianos. El lugar ofrece vistas increíbles y comodidad. Perfecto para grupos grandes con perros. La alberca es pequeña pero cómoda.

Un lugar precioso con un legado histórico importante. Ubicado entre pueblos y una zona arqueológica. Atención excelente, personal amable y atento. Lugar ideal para descansar, disfrutar de la naturaleza y la historia. Comida deliciosa, menús completos y detalles encantadores. Tranquilidad, sala de lectura, comedor y gastronomía destacables.

Me sentí totalmente relajado, no tengo ninguna pega.

Precioso lugar con legado histórico importante

Ubicación entre pueblos y zona arqueológica. Atención excelente del dueño y personal.- Bonito lugar para descansar y conectar con la naturaleza y la historia

Hermoso lugar histórico, en zona importante con pueblos y sitio arqueológico cercanos. Excelente atención del dueño y personal amable y atento. Ideal para descansar, disfrutar de la naturaleza y conocer la historia del lugar. Pet friendly, con adorables anfitriones caninos. Desayuno delicioso. Recomendable.

Qué maravillosa experiencia en este increíble lugar entre montañas! El anfitrión Rafael nos recibió con calidez y nos consentió con deliciosa comida casera. Las instalaciones bonitas y cómodas, con una alberca refrescante y un paisaje impresionante. Además, el personal amable siempre estuvo al pendiente de nosotros. Disfrutamos de nuestra habitación con una king size cómoda y nos desconectamos del mundo gracias al hermoso entorno. Sin duda, un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la tranquilidad.

El wifi podría mejorar su alcance para una mejor conexión.

Disfruté mucho de mi estancia en Hacienda Santa Clara. El ambiente de paz y tranquilidad que se respira en la hacienda es maravilloso. me encantó poder llevar a mi mascota, ¡se divirtió mucho con los labradores y el gatito del lugar! La comida casera que se sirve en el hotel es deliciosa, especialmente el desayuno, comida y cena. Además, las instalaciones de la alberca eran geniales, aunque el agua estaba un poco fría. Recomiendo llevar vino para disfrutar de los espectaculares atardeceres. Agradezco las atenciones de Don Rafa y su amabilidad hacia nosotros.

No había mucha variedad de atracciones cerca del hotel para explorar a pie, pero en automóvil se puede llegar a diversos lugares en menos de 30 minutos. hubo problemas con la conexión wifi, no pudimos bajar la aplicación para transferencias.