Este hotel ofrece una experiencia de lujo verdaderamente exclusiva. Desde el momento en que llegas, te hacen sentir como en el paraíso. El personal es amable y servicial, siempre dispuesto a ayudar. Las instalaciones son impresionantes, con una piscina al aire libre que ofrece vistas espectaculares. La ubicación es perfecta, con acceso directo a la playa y a un hermoso jardín. Además, las habitaciones están equipadas con comodidades exclusivas que te hacen sentir como en casa. El restaurante del hotel ofrece una deliciosa comida, con una variedad de opciones para elegir.

El único aspecto negativo que encontré en este hotel fue que el menú del restaurante podía ser un poco limitado. Aunque la comida era deliciosa, me hubiera gustado tener más opciones para elegir.

El ambiente y la vegetación crean un ambiente increíble para desconectarse de la ciudad. Las instalaciones del hotel, incluyendo las piscinas y el espacio de relajamiento, son maravillosos.- El personal, especialmente Talia y Rubén, fueron fundamentales para hacer que nuestra estancia fuera excelente.- La ubicación del hotel, junto a la naturaleza y cerca de la playa, es perfecta para disfrutar de total relax.

Imposible encontrar algo.

El diseño y la arquitectura del hotel son increíbles. Nos encantó la paz y tranquilidad que se respiraba en todo momento. Además, la alberca privada y la vista elevada desde nuestra habitación eran simplemente asombrosas. Todo el personal fue extremadamente amable y siempre dispuesto a hacer nuestra estancia placentera. Nos sentimos realmente bienvenidos.

Nos dijeron que eran 4 platos, pero resultó que eso incluía el postre y los totopos. Fue una cena un poco ridícula y bastante limitada, especialmente para el precio que pagamos.

Terrestre es un hotel maravilloso donde puedes disfrutar de una ubicación en la playa junto a la naturaleza. Las habitaciones son cómodas y cuentan con excelentes vistas. Además, el servicio es amable y atento, asegurándose de que tu estancia sea lo más placentera posible. Por las mañanas, se puede disfrutar de un delicioso desayuno y luego relajarse en la alberca privada. Sin duda, es el lugar perfecto para desconectar y descansar.

Nos encantó la ubicación del hotel, en plena naturaleza y junto a la playa. Disfrutamos de unas vistas increíbles mientras nos relajábamos en las piscinas y espacios de relajamiento. Además, el personal de recepción, como Rubén, nos ayudaron en todo momento para que nuestra estadía fuera excelente.

El servicio del restaurante podría mejorar y hubo algunos insectos que nos molestaban, aunque con suficiente repelente se resolvía.

estancia increíble en Puerto Escondido, Design Hotels superó expectativas; personal amable y servicial, arquitectura y ubicación únicas, alberca privada con vista espectacular. Destacables las atenciones de Talia, Ruben y Ricardo. Comida deliciosa, aunque desayuno limitado. Aplaudimos la convivencia con perros callejeros adoptados. Imprescindible cenar en el restaurante japonés cercano. Recomendamos coche alto para llegar.

servicio en la playa lento

Diseño, arquitectura, paz, sonido de la naturaleza y el mar, alberca privada y vista elevada. Personal amable y atento. Cerca de Casa Wabi y otros hoteles fabulosos en la playa. Piscinas y espacio de relajamiento maravillosos. Comida deliciosa. Cerca de Zicatela, Bacocho y el centro. Convivencia con la naturaleza y perros adoptados. Acceso restringido a la playa.

El hotel es increíble. Disfrutamos de unas vistas impresionantes y la arquitectura del lugar es hermosa. Pudimos relajarnos completamente gracias a la paz y tranquilidad que ofrece el entorno. Además, la alberca privada en nuestra habitación fue un verdadero lujo. El personal fue extremadamente amable y siempre dispuesto a hacer nuestra estancia placentera. Nos encantó la conexión con la naturaleza y la adopción de perros callejeros por parte del hotel.

Creemos que por el precio que pagamos, la habitación debería haber tenido aire acondicionado y estar completamente cerrada por las noches. El calor y la presencia de animalitos fueron un tanto incómodos durante nuestras noches de estancia.

El hotel es increíble. La arquitectura del lugar y su ubicación lo hacen muy especial. Está cerca de Casa Wabi y otros hoteles fabulosos, casi sobre la playa. Las piscinas y el espacio de relajamiento son maravillosos. El personal de recepción, especialmente Rubén, ayudaron en todo para hacer la estadía una excelente experiencia. Talia, la concierge, fue fundamental para que nuestra estancia fuera tan buena. Rubén también fue un tipazo. Ricardo del restaurante también fue genial. Todo lo que pedimos lo hicieron realidad y la comida fue super rica. El lugar cuenta con una playa muy cerca y un espacio aislado para total relax. El servicio gratuito del hammam es un detalle padre. Me encanta cómo hay una plena convivencia con la naturaleza y que tienen a varios perros callejeros adoptados.

El hotel es increíble. La atención del personal fue fundamental.El servicio en el restaurante fue excelente.La ubicación cerca de la playa.

Nada podría haber sido mejor.

La arquitectura y ubicación hacen que sea especial. Cerca de Casa Wabi y otros hoteles fabulosos. Piscinas y espacio de relajamiento maravillosos. Personal de recepción ayudó en todo para hacer la estadía excelente.

El ambiente, la vegetación y el mood del lugar están increíbles. Es el lugar perfecto para desconectar de la ciudad y disfrutar de la playa. Además, el hotel es miembro de Design Hotels, lo cual asegura un diseño y estilo únicos. El servicio del personal es amable y dispuesto a hacer nuestra estancia placentera.

Las vistas del hotel son increíbles, al igual que la arquitectura del lugar. La ubicación es cercana a otras fabulosas propiedades y está casi sobre la playa. Las piscinas y el espacio de relajamiento son maravillosos. El personal de recepción, especialmente Rubén, nos ayudó en todo y hizo que nuestra estadía fuera una excelente experiencia.

El hotel se encuentra en un entorno natural espectacular, rodeado de vegetación y muy cerca de la hermosa playa. Los huéspedes pueden disfrutar de increíbles vistas desde la alberca privada y relajarse en el espacioso y cómodo cuarto. Además, el personal del hotel es amable y atento, brindando un excelente servicio.

El servicio en el restaurante puede ser lento en ocasiones.

La ubicación y arquitectura del lugar lo hacen especial, cerca de Casa Wabi y otros hoteles fabulosos. Piscinas y espacio de relajamiento maravillosos. Personal de recepción, especialmente Rubén, ayudó en todo y fue una excelente experiencia.