El lugar es hermoso, rodeado de naturaleza y con una alberca privada. El desayuno flotante es una experiencia increíble y la comida mexicana deliciosa. El personal brinda una atención excepcional, estando siempre disponibles y atentos a nuestras necesidades. Además, nos permitieron usar bicicletas para visitar los cenotes de la zona. Recomiendo este lugar para una experiencia inolvidable.

El lugar es increíblemente bello y perfecto para descansar. Nos encantó la atención del personal, especialmente de Arturo, Javi, Erik y Toño. La comida en el restaurante es deliciosa, especialmente la cena. Disfrutamos mucho de la música y la fogata por las noches. Además, el desayuno incluido es espectacular gracias al Chef y su equipo. Aunque está alejado de todo, es perfecto si buscas relajarte y visitar los cenotes cercanos. En general, recomendaría este hotel.

La ubicación de este lugar es perfecta, ya que está rodeado de naturaleza y se puede disfrutar del sonido de los pájaros y la tranquilidad del entorno. Además, la alberca privada es increíble, especialmente para aquellos que buscan privacidad y relajación. Otro aspecto positivo es el personal, que brinda una atención excepcional y personalizada, siempre al pendiente de que los huéspedes estén cómodos y contentos.

La publicidad del lugar puede ser engañosa, ya que puede crear expectativas que no se cumplen al llegar. Además, algunos servicios no están a la altura de lo esperado, como la falta de privacidad en las villas, con la ausencia de puertas y cortinas en la ducha y la poceta.

Me encantó la escapada que hice a este hotel. Me gustó mucho el diseño y la limpieza de las instalaciones. Además, la comida fue deliciosa, especialmente el plato de pesca del día. Una de las ventajas más destacadas es la ubicación del hotel, muy cerca de un cenote que pudimos visitar. También disfruté mucho de la experiencia en el temazcal y de la música en vivo los sábados por la noche.

Hubo algunos aspectos que no me gustaron. El ruido del motor de la planta generadora de electricidad era bastante molesto.

Desde el momento en que llegamos a Yellow Nest todo fue mágico. Nos recibieron con un trago de bienvenida y el personal fue muy amable y cálido. La atención hacia los huéspedes es de calidad, personalizada y eficiente. El ambiente grato y pleno nos hizo sentir especiales. Los servicios son flexibles y tienen solución para todo. Arturo, el anfitrión, fue sorprendentemente amable y alegre. Definitivamente regresaremos pronto a este hermoso lugar.

Atención personalizada y amable. Detalles pensados para comodidad. Comida deliciosa y buen precio. Desayuno en el agua fue una gran experiencia. Servicios flexibles y soluciones para todo. Personal positivo y humilde que te hace sentir especial. Volveremos pronto.

Desde el momento en que llegamos a Yellow Nest, todo fue mágico. Nos recibieron con un trago de bienvenida y el personal fue muy amable y cálido. La atención hacia los huéspedes es de calidad, personalizada y eficiente. Además, cada integrante del personal tiene una característica especial, todos son gente positiva y humilde, lo que hace que la relación sea muy buena. También valoramos los servicios flexibles y la excelente disposición del hotel para satisfacer nuestras necesidades. Arturo, el anfitrión, nos sorprendió con su buena disposición y carisma contagioso. Definitivamente regresaremos pronto a este hermoso lugar.

Recomiendo este hotel, es total.

El hotel se encuentra en un entorno natural impresionante, rodeado de selva y cenotes, lo cual brinda una experiencia única para aquellos que buscan desconectarse y descansar. Además, el personal del hotel es muy amable y atento, siempre dispuestos a ayudar en cualquier situación. El desayuno es espectacular, con opciones deliciosas preparadas por el equipo de cocina. hay diversas actividades disponibles, como el temazcal y la fogata por la noche, que hacen que la estancia sea aún más especial.

La falta de puertas y cortinas en la villa puede resultar incómodo, especialmente si se viaja en pareja y se busca algo de privacidad en la ducha o en la poceta. Esto es algo que limita el nivel de comodidad en la habitación.

Desde el momento en que llegamos a Yellow Nest, todo fue mágico. Nos recibieron con un trago de bienvenida y el personal fue muy amable y cálido. La atención hacia los huéspedes es de calidad, personalizada y eficiente. Las instalaciones son bellas, con varios lugares para tomar fotos. La comida es deliciosa, especialmente la pesca del día. El temazcal es una experiencia sublime y los sábados hay música en vivo que anima la noche. También está cerca del cenote Dos Ojos.

Puedo recomendar este hotel a todos.

En medio de la selva, perfecto para desconectarse. Camino sin luces, conviene llegar antes de la noche. Comida deliciosa y precios accesibles. Desayuno en el agua, temazcal y fogata con bombones excelentes. Personal amable y atento, especialmente Arturo. ¡Maravillada y feliz!

Desde el momento en que llegamos a Yellow Nest todo fue mágico. Nos recibieron con un trago de bienvenida y nos sorprendieron con su amabilidad y calidez. El personal se preocupó por nuestras necesidades y nos hizo sentir especiales. Las instalaciones estaban impecables y cuidadas. La comida superó nuestras expectativas, especialmente los desayunos, que ofrecían opciones deliciosas y saludables. También disfrutamos de las bicicletas que nos prestaron para explorar los cenotes cercanos. En resumen, nuestra estancia fue perfecta en todos los sentidos y recomendaría este lugar sin dudarlo.

Si hay algunas cosas que podrían mejorar. Por ejemplo, la carta de alimentos podría tener más variedad, especialmente para estancias más largas.

Hermoso lugar en medio de la naturaleza. Atención excelente del personal. Desayuno flotante y cena romántica. Alberca privada y ambiente de descanso. Escuchar pájaros y sonidos de la naturaleza. Servicio personalizado y atención 24/7. Excelente comida y bebidas. Excursiones a cenotes y préstamo de bicicletas

Nada de nada.

Este hotel en medio de la selva es simplemente una maravilla. Las habitaciones son cómodas y huelen muy bien. El desayuno incluido es delicioso y se puede disfrutar flotando en el agua. El personal siempre está al pendiente y muy amable. Además, el hotel cuenta con muchas facilidades como una alberca con árboles en medio y prestan bicicletas para visitar los hermosos cenotes cercanos. La ubicación en la selva es perfecta para desconectarse y descansar.

Es difícil recordar algo, este lugar superó todas mis expectativas.

Empezaremos por decir que la atención del lugar no tiene igual, ultra personalizada. Llegando recibimos un par de bebidas que nos permitieron adentrarnos en este lugar místico que nos llevó a reconectar con la naturaleza. La habitación de lujo, cada detalle está pensado para nuestra comodidad. Volvería una y mil veces. La comida deliciosa. Muy recomendable la cena romántica y el desayuno flotante.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Desde el momento en que llegamos a Yellow Nest, todo fue mágico. Personal amable y cálido. Atención de calidad y personalizada. Servicios flexibles y con buena disposición. Anfitrión con disposición y alegría contagiosa.

No había nada que no me gustara.