La ubicación era perfecta, justo al lado del océano y cerca de centros comerciales y bares. La habitación era amplia y cómoda, con un baño moderno y bien equipado. El servicio fue impecable, siempre atentos a todas mis necesidades. Además, el desayuno fue variado y delicioso, con una amplia selección de platos para elegir. Sin duda, una experiencia inolvidable.

La única pequeña falla que encontré fue en uno de los restaurantes del hotel, que no cumplió completamente mis expectativas.

Lo que más me gustó fue la elegancia y el encanto histórico del edificio, que parece haberse quedado atrapado en el tiempo. Además, la ubicación en un barrio privilegiado cerca del centro de la ciudad fue muy conveniente. Otro aspecto destacado fue la amabilidad y profesionalismo del personal del hotel, siempre dispuestos a ayudar y a hacer que la estancia fuera lo más placentera posible.

Hubo algunos aspectos que no me gustaron tanto. Por ejemplo, me pareció que la variedad y calidad del desayuno podrían haber sido mejores, especialmente en lo que respecta al pan.

Habitaciones y baños amplios y limpios. Hermosos jardines en el hotel.- Buena atención y personal amable.- Excelente ubicación cerca de centros comerciales y bares.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

Amplias habitaciones y baños, bellos jardines, excelente atención al cliente. Almacenaron una maleta durante dos semanas sin ningún problema.