Mi estancia en este lugar fue simplemente maravillosa. Desde el momento en que llegué, me enamoré de las vistas espectaculares y únicas del Volcán Barú. Las habitaciones eran amplias y cómodas, y me encantaba despertar cada mañana y ver las montañas desde mi ventana. disfruté mucho de las instalaciones, especialmente de la piscina cubierta y el jacuzzi, perfectos para relajarse después de un día de aventuras. Además, la dueña del hotel fue extremadamente amable y siempre dispuesta a ayudar. Sin duda, una de las mejores partes de mi estancia fue poder disfrutar de la comida en la gran mesa del salón junto a otros huéspedes. Fue una experiencia única compartir momentos y conversaciones con personas de diferentes partes del mundo. Aunque el hotel no está cerca del pueblo, el transporte gratuito que ofrecen a determinadas horas del día facilitó mis desplazamientos. En resumen, mi estancia en este hotel fue realmente especial y lo recomendaría a cualquiera que busque un lugar original con vistas preciosas.

Me gustó mucho el ambiente campestre y las opciones para tomar fotos en este lugar. Además, la ubicación en medio de la montaña ofrece vistas hermosas. disfruté de la comida, especialmente los desayunos, que eran buenos y accesibles en términos de precio.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estadía. En uno de los bungalows, el agua caliente no funcionaba y las toallas estaban sucias.

Me gustó mucho mi estadía en este lugar. El diseño del bungalow superó mis expectativas y estaba muy bien cuidado. La cama era muy cómoda y las instalaciones eran prácticas. Además, las vistas desde el lugar eran increíbles y el precio era bastante razonable. disfruté de la tranquilidad del entorno y poder escapar del ruido de la ciudad.

Hubo algunos aspectos negativos que me decepcionaron. Por un lado, faltaban algunas cosas básicas de aseo, como champú y un jabón decente.

El lugar en el que me hospedé era muy tranquilo, con vistas bonitas y un edificio con encanto. La habitación en la que me alojé era cómoda, con una cama cana que garantizó un buen descanso. Además, el personal fue amable y servicial, brindando un excelente servicio al cliente.

Algunos huéspedes fumaban en el área abierta, lo cual está prohibido por ley en Panamá. Sería mejor que el hotel colocara un letrero que indique que no está permitido fumar en esas zonas.

Nos hospedamos en un bungalow de jardín y la habitación era amplia y limpia. Las instalaciones comunes, como el jacuzzi y la piscina, fueron geniales, especialmente porque pudimos disfrutar de las tardes de lluvia. Además, tienen una cocina que los huéspedes pueden usar, la cual es muy cómoda. Sin duda, repetiríamos si regresáramos.

Nada, todo bien! 😊

La vista al volcán Barú es excelente. Durante nuestra estancia disfrutamos de unas vistas impresionantes del volcán Barú, lo cual fue realmente maravilloso. Además, las instalaciones del hotel, como la piscina y la sala de televisión, eran geniales. El personal del hotel siempre estaba disponible y atento, lo cual hizo que nuestra estancia fuera aún más agradable. El ambiente con los otros viajeros también era muy bueno y nos sentimos muy bienvenidos. Además, alojarse en la torre de un castillo fue una experiencia única y emocionante.

En la habitación donde está la piscina hay obras, están construyendo un bar con futbolín. Desafortunadamente, durante nuestra estancia las obras de construcción del bar con futbolín estaban en curso, lo cual limitó nuestra capacidad para disfrutar plenamente de la zona de la piscina.

Me alojé en un castillo con muchos atractivos. La habitación en la torre era hermosa y tenía una cama deliciosa. Además, el hotel estaba muy limpio y tenía excelentes acabados. El desayuno era rico y las áreas comunes eran perfectas para socializar con personas de diferentes países. También había una piscina y buenos espacios recreativos.

El castillo está un poco alejado del centro, pero si tienes transporte, no es un problema. También había algunas pequeñas incomodidades, como las escaleras en caracol para acceder al baño y la falta de visibilidad de las vistas desde la cama debido al diseño de la habitación.

Mi estancia en Bambuda fue una experiencia super agradable. Las instalaciones y habitaciones son especiales, con una vista brutal desde el castillo. El personal es muy amable y el trato es excelente. Además, tienen piscina, jacuzzi y una cocina bien equipada para preparar lo que necesites. Recomiendo este lugar al 100%.

Por supuesto que lo recomiendo.