Nos gustó mucho la amplitud de las habitaciones, estaban bien decoradas y el baño era espacioso y equipado. Además, el desayuno casero era delicioso y variado, con zumo de naranja natural y bizcocho casero. También destacamos la ubicación cerca de varias ciudades importantes, lo cual fue muy conveniente para nuestras excursiones.

No nos gustó que las puertas de las habitaciones tuvieran maneta para poder abrirlas desde fuera, lo cual era incómodo y nos obligaba a cerrar siempre con llave desde dentro. Además, nos hubiera gustado que el hotel ofreciera servicio de cena, ya que cuando llegábamos por la noche después de un día de turismo, era un inconveniente tener que ir a buscar dónde cenar fuera del pueblo.

Habitaciones amplias y bien decoradas. Baño espacioso y equipado. Atenta dueña. Cerca de parking y restaurantes. Desayuno rico y económico.

La limpieza del hotel era excepcional, desde las habitaciones hasta las zonas comunes. Nos sentimos muy cómodos y acogidos durante nuestra estancia. El personal fue muy amable y atento, proporcionando información útil sobre los lugares de interés en los alrededores. El desayuno buffet ofrecía una gran variedad de opciones, incluyendo zumo natural y deliciosas tartas caseras. Además, la ubicación del hotel nos permitía tanto visitar la ciudad como disfrutar del hermoso entorno rural.

Nada de verdad.

La Casa Vieja es una excelente opción para alojarse en los alrededores de Vitoria. Doña Reyes, la anfitriona, es un encanto y la casa es preciosa y limpísima. Siempre huele a jabón. El trato es formidable y la limpieza está impecable. Además, la ubicación es perfecta para hacer agriturismo por la zona, cerca del embalse de Landa y es una buena base para hacer excursiones hacia las playas del norte, donde también se rodó Juego de Tronos. El desayuno servido de 8:00 a 10:00 de la mañana es delicioso y por el precio me pareció demasiado barato. Nos sirvieron un zumo natural de naranja muy bueno, junto con jamón, queso y un bizcocho hecho por la propia Doña Reyes. Se nota que se entrega completamente en su tarea de atender a la gente y nos cuidó como si fuéramos sus hijos. Es sin duda un lugar tranquilo y acogedor.

Me sentí realmente bien recibido, no tengo ninguna pega.

Nos encantó nuestra estancia en La Casa Vieja. El trato de Reyes, la anfitriona, fue excepcional. La habitación estaba impecable, amplia y fresca. El jacuzzi funcionaba perfectamente y nos dejó relajados después de un día de exploración. En cuanto al desayuno, fue delicioso y muy completo. Además, la ubicación del hotel es perfecta, cerca de hermosos entornos naturales y de la ciudad de Vitoria. En resumen, recomendaría este hotel sin dudarlo.

Aunque nos encantó la experiencia en general, es importante tener en cuenta que no hay opciones para comer en el pueblo, por lo que se necesita el coche para desplazarse. echamos en falta algo de variedad en el desayuno después de varios días.

Me encantó la tranquilidad del lugar y la sensación de estar como en tu propia casa. La dueña súper amable y pendiente de nuestra estancia. Está cerca de bellos entornos naturales y de Vitoria capital. La habitación amplia con ducha hidromasaje y el desayuno buenísimo con embutido variado y bizcocho casero. Un sitio magnífico para descansar y desconectar de todo por un precio ajustadisimo.

100% Recomendable.

Este hotel es uno de los mejores lugares en los que nos hemos alojado en España. La relación calidad-precio es excelente y la atención a los detalles es excepcional. La ubicación es hermosa y está a solo 3 km de un increíble parque nacional con excelentes rutas para ciclismo alrededor de un hermoso lago. Las habitaciones son muy limpias, cómodas y espaciosas, al igual que los baños, que son grandes y cuentan con una cama adicional que permitió que dos adultos y dos niños compartieran la habitación. El desayuno es realmente bueno, con pastel casero y zumo de naranja fresco. Además, el ambiente es relajado y acogedor, y la atención del personal es amable y servicial. Este hotel es sin duda uno de los mejores en su categoría.

Todo estuvo bien, no hay nada que pueda mejorar.

Si buscas un lugar tranquilo para descansar, te recomiendo este agroturismo. Está ubicado cerca de la autopista y de hermosos entornos naturales. La dueña es muy amable y atenta, y las habitaciones son espaciosas y bien decoradas. El baño es amplio y está bien equipado. Además, el desayuno es delicioso y muy económico. ¡No te pierdas el zumo de naranja natural y el bizcocho casero! hay parking cerca de la casa y varios pueblos donde disfrutar de buena comida.

Algunos huéspedes pueden ser ruidosos y afectar el descanso.

El edificio y las habitaciones están bien restauradas y decoradas. El entorno natural es muy bonito y tranquilo. El desayuno y el servicio son excelentes. La dueña es amable y servicial. Hay una neverita en el comedor con refrigerios a buen precio.

Lo que más me gustó de mi experiencia fue la atención de los propietarios, se mostraron muy amables y atentos durante toda mi estancia. Además, las instalaciones estaban impecables, todo muy nuevo y limpio. Otra ventaja fue que se encontraba cerca de la ciudad, lo cual nos permitió conocer y disfrutar de la gastronomía local. me encantó el entorno del hotel, rodeado de naturaleza y con fácil acceso a bonitos paseos por la montaña.

Hubo aspectos que no me gustaron tanto. Uno de ellos fue la falta de luz en la habitación durante la noche, tuve que usar un antifaz para poder dormir bien.

Ubicación, atención, limpieza, habitación amplia, jacuzzi, fiestas locales.

Nada, todo fue maravilloso.

El desayuno del hotel estaba delicioso y a un precio muy económico, con zumo de naranja natural, jamón, queso y un bizcocho casero. Nos atendieron de maravilla y nos hicieron sentir como en casa. La ubicación del hotel es ideal para quienes están de paso, ya que está cerca de la autopista y a menos de 1 hora en coche de Bilbao y San Sebastián. Además, está rodeado de un hermoso entorno natural, cerca de un parque provincial recreativo y de iglesias pintadas muy interesantes.

No había nada que no me gustara.

Nos quedamos encantados con nuestra estancia en Agroturismo La Casa Vieja. El desayuno fue delicioso y a un precio muy asequible de 5 euros. Reyes nos atendió de manera excepcional, sirviéndonos un zumo natural de naranja y ofreciéndonos jamón, queso y un delicioso bizcocho hecho por ella misma. Su dedicación y amabilidad nos hizo sentir como en casa. Además, la ubicación cerca de Vitoria y del Parque Provincial recreativo de Garaio fue perfecta para disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza. También pudimos visitar las impresionantes iglesias pintadas de Gazeo y Alaitza, así como hacer rutas por Gorbeia, Urkiola y el ojo de Aitzulo en Oñate. Recomendamos totalmente este lugar.

No hay nada malo que decir. 😊