Encontramos este lugar por casualidad y fue una grata sorpresa. El jardín es increíble para descansar y disfrutar del sol. Además, está muy bien ubicado, lo que facilita la visita a diferentes lugares de interés. Otro aspecto destacable es que tiene una buena lavandería, lo cual fue muy conveniente.

La cama en la que me tocó dormir fue muy incómoda, lo que dificultó mi descanso. Además, la falta de respeto al silencio a partir de las 23 horas fue un gran inconveniente.

El personal fue súper amable y me dio todas las facilidades. La limpieza del hotel fue excelente y se puede ver que se preocupan por mantenerlo impecable. Además, las instalaciones del hotel eran muy cómodas y acogedoras.

el albergue estuvo genial, en una visita de grupo a Melide. Las habitaciones compartidas eran espaciosas y solo éramos tres personas en una de ellas. La atención de la chica de recepción fue fantástica, y el jardín fue perfecto para descansar al aire libre. También nos encantó el desayuno delicioso y económico. Nos sorprendió gratamente la disponibilidad de lavadoras y el ambiente amigable en la cocina.

Cierre de puertas a las 23.00, algo molesto.

quedamos encantados con nuestra estancia en melide y nuevamente albergue san anton superó nuestras expectativas. el personal amable y atento, las instalaciones impecables y acogedoras, y el jardín y la terraza perfectos para relajarse. definitivamente volveremos!

El jardín amplio y las cómodas habitaciones fueron lo mejor. El personal fue muy atento y el lugar estaba limpio.

Na.

Las instalaciones están muy limpias. Los baños, la cocina y el comedor están muy cuidados, nuevos y limpios. El jardín que tiene detrás es ideal para descansar, cargar pilas y disfrutar del sol.

No me gustó que cierren la puerta a las 23.00 sin previo aviso. Asistimos a un evento y nos fastidió no poder cenar tranquilamente.

una parada de una noche en melide y decidimos quedarnos en este albergue. supero mis expectativas, ¡fue genial! El jardín tranquilo y agradable fue perfecto para relajarse, el personal amable y atento, las habitaciones espaciosas y limpias, ¡y el desayuno delicioso y a buen precio! Definitivamente recomiendo este lugar.

Ventana sin cortinas, no pudimos abrir.

Las habitaciones limpias y cómodas, calefacción eficiente, jardín agradable, bar/cafetería con buenos precios, buena ubicación cerca del camino.

Nada de nada.

Jardín y zonas comunes excepcionales. Desayuno aconsejable, rápido y bueno. Buena ubicación céntrica y cerca de servicios. Buena limpieza y camas confortables con sabanas desechables y edredón incluido.

Mi estancia en Albergue San Anton fue excelente. Pasé una noche aquí y quedé muy satisfecho con todo. La habitación de 4 personas era cómoda y tenía una cama confortable. Me gustó especialmente el patio privado donde pude descansar y disfrutar de un café después de un largo día. La ubicación del albergue es perfecta, ya que está cerca de la iglesia del pueblo y es muy conveniente para los caminantes del Camino de Santiago. Además, ofrecían un desayuno por solo 3€ que estaba delicioso. También me encantó el jardín y las zonas comunes, son ideales para relajarse. Recomiendo desayunar en el albergue, fue rápido y sabroso.

Recomendaría a todos este lugar.

estuve en melide antes y me hospede en albergue san anton. esta vez, lo visite con un grupo y supero mis expectativas. las camas eran comodisimas y habia un enchufe para cada persona. tambien me encanto el jardin amplio y el servicio de bar. todo estaba muy limpio y la ubicacion era perfecta.

Falta mas iluminacion en las duchas.

Me ha gustado mucho mi estancia en este albergue. Los puntos destacados incluyen camas cómodas, una habitación bonita y acogedora, y nórdicos en cada cama. había una pequeña estantería en cada cama para guardar nuestras pertenencias, lo cual fue muy conveniente. Además, el albergue tenía un amplio patio con lavandería y una cocina completa. Incluso había un bar si no querías cocinar. El desayuno tenía muchas opciones y a precios asequibles. había juegos de mesa en la zona de comedor.

Hubo algunos aspectos negativos. Había muy pocos baños para tanta gente, lo que resultaba insuficiente.

Las habitaciones no estaban saturadas, ofrecían enchufes individuales y camas cómodas con sábanas desechables y edredón incluido. La calefacción estaba conectada y el albergue contaba con un amplio jardín y un servicio de bar/cafetería con precios razonables. También disponía de servicio de lavandería y tendedero. Los baños tenían duchas individuales y se encontraban siempre limpios. La ubicación del albergue era perfecta, cerca del centro del pueblo y de todos los servicios.

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna razón para quejarme.