Vistas increíbles, baño estupendo, habitación bien decorada, cama cómoda, nevera y cafetera en la habitación. Trato exquisito del recepcionista. Ubicación fantástica en la Plaza de Santa Ana. Hotel con encanto, buen desayuno y habitaciones amplias. Terraza en el último piso con vistas geniales.

La ubicación del Boutique Hotel Cordial Plaza Mayor de Santa Ana es excelente, justo en la plaza Santa Ana, al lado de la catedral. La habitación en la que nos alojamos era simplemente preciosa, con un equipamiento de lujo y muy amplia. Además, era extremadamente tranquila, lo que nos permitió descansar perfectamente. El personal de recepción fue sumamente amable y atento. La terraza-bar del hotel es simplemente espectacular, con unas vistas impresionantes. Además, el baño de la habitación era muy amplio y cómodo, al igual que la cama.

Aunque no sea exactamente culpa del hotel, la distancia al parking recomendado puede ser un poco pesada si llevas maletas. También nos hubiera gustado que el desayuno tuviera más variedad, aunque el personal encargado de atenderlo lo hacía de manera genial.

La ubicación en una plaza, la limpieza impecable, el desayuno excelente y el personal amable.

Nada que pueda disgustar.

El hotel está ubicado en una plaza encantadora, con vistas impresionantes a la Catedral. La habitación es bonita y amplia, con detalles como una cafetera y agua incluidos. El baño es espacioso y cómodo, con todas las comodidades necesarias. El servicio de atención al cliente es amable y cercano. Además, el hotel cuenta con un rooftop genial para disfrutar de una bebida y apreciar las vistas nocturnas de la ciudad.

Un aspecto negativo es que el hotel no ofrece desayuno incluido en el precio de la habitación.

el hotel superó todas mis expectativas. La ubicación en la Plaza de Santa Ana es perfecta, la habitación era amplia y cómoda, y el personal fue amable y servicial. La terraza en la azotea ofrece vistas impresionantes y es ideal para relajarse con una copa.

Falta de experiencia en la recepción.

Nos encantó la ubicación del hotel, justo en una plaza con vistas impresionantes a la Catedral. nos sorprendió la belleza del edificio antiguo rehabilitado, con habitaciones espaciosas de techos altos. Además, el desayuno era de gran calidad y el personal muy amable y profesional.

El único aspecto negativo fue el ruido por la noche de los aires acondicionados, lo cual afectó un poco nuestra calidad de sueño.

Ubicación excelente, vistas preciosas, habitación bonita y amplia, atención amable y cercana, Rooftop guay.

Nada, ninguna queja.