balaguer sigue siendo encantador, y cal comabella sigue destacando. la habitación da a la plaza: amplia, bien equipada, y cómoda. el piso, con su estilo catalán auténtico, es un sueño.

wifi limitado.

El hotel es encantador y está muy bien ubicado. Las habitaciones son espectaculares con detalles catalanes auténticos, como vidrieras y techos altos. Me encantaron los espacios comunes acogedores y la cocina común. Además, disfrutamos de la terraza soleada y del jardín, ideales para relajarse en familia. Los lugares cercanos, como el Museo de La Noguera y el Santurari Sant Crist de Balaguer, añadieron un toque cultural a nuestra estancia, fortaleciendo nuestros lazos familiares mientras explorábamos la zona. Aunque le hace falta algo de mantenimiento y la insonorización no es perfecta, la hospitalidad de Jaume y la experiencia en general fueron muy positivas y acogedoras. Sin duda volvería a alojarme aquí si regreso a la zona. ¡Gracias por todo!

el sitio es precioso, las habitaciones espectaculares, y la ubicación está en el centro de la ciudad. aprendí mucho sobre el piso catalán. destaco que ofrecen café e infusiones gratis para los huéspedes.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Alojarnos en este hotel fue una experiencia realmente placentera. En primer lugar, el hotel está muy bien ubicado en el corazón del casco antiguo, lo que nos permitió explorar fácilmente la zona y disfrutar de la vida nocturna de los bares y restaurantes cercanos. Además, las habitaciones son espaciosas y llenas de encanto, situadas en un edificio antiguo muy atractivo. Nos encantó despertarnos y disfrutar del sol de la mañana en la amplia terraza compartida.

Me sentí como una reina en el Cal Comabella, con un balcón perfecto para tomar té y disfrutar del WiFi. Además, pude hacer senderismo y ciclismo cerca, ¡quién lo diría!

Qué divertido fue quedarme despierta hasta tarde por la música estruendosa del bar de al lado, ¡qué descanso más animado!