Acabamos de regresar de Can Vila y ha sido una experiencia espectacular. Estuvimos dos noches y pudimos desconectar por completo. Lo mejor fue la libertad que ofrecen para llevar a nuestros perros, además de lo acogedora que era la casa. Los dueños nos trataron de maravilla y el desayuno fue de diez. Si buscas un alojamiento tranquilo, donde puedas socializar con otros huéspedes y disfrutar de la naturaleza, este es el lugar perfecto. Sin duda, volveremos.

Nos alojamos en una casa rural que nos sorprendió gratamente en todos los sentidos. La casa era grande, bonita y tranquila, perfecta para relajarse. Las habitaciones eran amplias, limpias y decoradas con buen gusto. Disfrutamos de un delicioso desayuno todos los días y el servicio por parte de los propietarios fue excepcional. Además, la ubicación nos permitió hacer emocionantes excursiones por la zona. Definitivamente volveremos a repetir esta experiencia maravillosa.

El único aspecto negativo que encontramos fue la dificultad para encontrar el lugar debido a la falta de señalización clara en la zona.

Mi estancia en Can Vila fue maravillosa. Pasé varios días de descanso y paz en esta espectacular casa rural. Tanto Gloria como Koldo fueron unos anfitriones geniales, haciéndome sentir como en casa. El trato fue exquisito y el ambiente cálido y acogedor. El jardín y la piscina eran perfectos para relajarse, especialmente para los peludos. Además, la decoración tanto del interior de la casa como de las habitaciones estaba hecha con mucho gusto. Las cenas, cocinadas y servidas con mimo, fueron increíbles. Sin duda, repetiré.

En los aspectos positivos, Can Vila en Sant Julia del Llor ofrece una estancia maravillosa con naturaleza, piscina y bicicletas. Los anfitriones, Gloria y Koldo, son excepcionales, con una cocina deliciosa y un trato acogedor. Desconectar de la ciudad es perfecto en este lugar.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara.