La estancia en Capela Da Granxa fue maravillosa. La casa está equipada con todo lo necesario para una estancia agradable y cómoda. Los colchones son nuevos y muy cómodos, lo cual garantizó un buen descanso después de nuestras actividades diarias. Además, la ubicación al lado de un río con aguas transparentes fue un auténtico privilegio. Pudimos bañarnos e incluso pasear en la barca que el dueño pone a disposición de los huéspedes. La casa es amplia y tiene un diseño moderno que nos encantó. Manuel, el propietario, fue muy amable y nos brindó recomendaciones sobre lugares para comer y visitar en la zona.

Aunque nuestra estancia fue en general muy positiva, hubo algunos aspectos que podrían mejorarse. Por ejemplo, siendo un grupo grande de 15 personas, echamos de menos la presencia de un lavavajillas en la cocina, lo cual hubiera facilitado la limpieza de los platos.