Las vistas desde la casa eran impresionantes, con una panorámica del hermoso valle que era simplemente maravillosa. La habitación con mejores vistas era amplia, cómoda y relajante, con una chimenea acogedora que creaba un ambiente muy agradable. La anfitriona fue encantadora y muy atenta, ayudándonos a organizar nuestro viaje y asegurándose de que tuviéramos una estancia agradable.

El horario de check-in estaba limitado entre las 15h y las 18h, lo que podría ser restrictivo dependiendo de nuestros planes de viaje. Sin embargo, con una buena organización, se podía aprovechar ese tiempo para disfrutar de los excelentes restaurantes de Pedro Bernardo mientras esperábamos la hora de entrada.

Me encantó la increíble vista panorámica del valle desde la habitación, es realmente impresionante. Además, la habitación en sí era muy cómoda y relajante, con una chimenea acogedora que creaba un ambiente agradable. La anfitriona fue encantadora y super atenta, nos ayudó a organizar nuestro viaje y hacer que nuestra estancia fuera aún mejor. ¡Fue genial!

El horario de check-in limitado entre las 15h y las 18h fue un poco incómodo, pero con una buena planificación se puede superar. El baño del ático era cuco y modesto, un poco pequeño para mi gusto, pero aún funcional.