Lo mejor de nuestra escapada fue la habitación con terraza y baño privado, realmente perfecta. También disfrutamos mucho de la ubicación, con vistas geniales y cerca de numerosas rutas de montaña. Además, la amabilidad y la atención del personal fue destacable. Por otro lado, hubo algunos aspectos negativos. Por un lado, nos hubiera gustado contar con una cocina para poder cocinar, aunque había microondas y barbacoa en el jardín. Además, las instalaciones estaban un poco anticuadas y les faltaba un poco de limpieza. A pesar de esto, disfrutamos mucho de nuestra estancia y consideramos que valió la pena.

Acabo de regresar de una estancia de dos noches en Casa Les Pomeretes en Figaro-Montmany. Mi pareja y yo estábamos buscando un lugar tranquilo para relajarnos y así fue. Aunque el hotel estaba lleno, tuvimos toda la piscina y las instalaciones para nosotros solos. En cuanto a la comida, la chica de la casa nos preparó un desayuno vegetariano delicioso y muy completo. La habitación era cómoda, con bonitas vistas al pueblo y a la montaña. Además, tenía algunos detalles especiales como persianas eléctricas y un armario con todo lo necesario para preparar bebidas calientes. También había un microondas disponible en la zona común.

Insisto, este lugar es super recomendado. Volveremos pronto.

Nos encantó poder llevar a nuestro perro sin problemas, además de contar con tres barbacoas y una increíble piscina. Por las noches, pudimos disfrutar de la tranquilidad del lugar y dormir frescos sin necesidad de aire acondicionado. Los colchones eran muy cómodos y encontramos todos los utensilios de cocina limpios y en buen estado. Además, las vistas a la montaña eran preciosas y había rutas de senderismo cercanas.

Para nosotros fue ideal.

diferentes estancias, trato del dueño, vistas fantásticas, piscina refrescante, posibilidad de barbacoa.

Todo es genial.

mi experiencia en Casa Les Pomeretes en Figaro-Montmany fue excepcional. El entorno tranquilo y las vistas a la montaña fueron perfectas para desconectar de la ciudad. Las rutas de senderismo cercanas y la piscina fueron un gran complemento para relajarse todos los días. Además, poder disfrutar de una barbacoa en la terraza fue un verdadero placer.

La ducha era un poco pequeña.

Mi pareja y yo nos quedamos en Casa Les Pomeretes durante nuestro viaje a Figaro-Montmany. Estuvimos allí por una semana y tuvimos una experiencia maravillosa. La anfitriona fue muy amable y aunque solo hablaba inglés, nos hizo sentir bienvenidos y se aseguró de que tuviéramos todo lo que necesitábamos. Como vegetarianos, nos preparó un delicioso desayuno con opciones especiales para nosotros, como tostadas de aguacate, pepino y cherris, tortilla y mini crepes de queso. Además, la habitación tenía detalles especiales como persianas eléctricas y un armario con utensilios de cocina, agua, café, infusiones y galletitas gratuitas. También había un microondas en el área común para nuestro uso. El baño privado tenía una pequeña ventana con vistas al pueblo y a la montaña, aunque no tenía cortina. La habitación también tenía acceso a una terraza con hermosas vistas.

Recomendaría a todos este lugar.

las vacaciones de verano en Figaro-Montmany fueron increíbles gracias a Casa Les Pomeretes. La habitación amplia, con baño privado y terraza, nos brindó unas vistas impresionantes. Además, la cama era cómoda y grande, lo cual hizo nuestra estancia aún más placentera.

Falta de persianas en la habitación.

Me encantaron las hermosas vistas a la montaña y la posibilidad de hacer rutas de senderismo en los alrededores. Además, disfruté de la piscina, que era refrescante en los días calurosos. me gustó disponer de una cocina totalmente equipada y un comedor con todo el menaje necesario.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estancia. La limpieza del baño podría haber sido mejor, ya que encontré algunas juntas sucias.

Nos encantó nuestra estancia en Casa Les Pomeretes Apartamento. Disfrutamos de la tranquilidad del lugar y la amabilidad del personal que nos atendió. La habitación a pie del jardín fue perfecta, y tener la posibilidad de llevar a nuestro perro fue un verdadero plus. Además, la piscina y la barbacoa nos brindaron momentos de diversión y relajación. Sin duda, volveremos pronto.

Nada en absoluto de lo que quejarse. 😉

Lo que más me gustó de mi estancia fue la habitación con terraza. Tenía un baño privado con bañera y una amplia terraza con mesa y sillones muy cómodos. Además, la ubicación era inmejorable, con unas vistas maravillosas a las montañas. También disfruté de la piscina, que era bastante grande y se encontraba en un entorno muy bonito. Por último, me alegró mucho saber que podía llevar a mi perro conmigo sin ningún problema, ya que era un lugar amigable para mascotas.

Hubo algunas cosas que no me gustaron. En primer lugar, hubo mucho ruido durante la noche debido a la pirotecnia de la noche de San Juan, a pesar de que me habían asegurado que era un lugar tranquilo.

La ubicación es perfecta, ya que se encuentra cerca de Barcelona y en un lugar tranquilo. Además, las vistas a la naturaleza son impresionantes. La habitación en la que me quedé era como un pequeño apartamento, con camas cómodas, sofás y una cocina. elegí la opción con desayuno y fue una gran elección, ya que disfruté de un delicioso surtido de bollería, bebidas, embutidos y pan en una sala con vistas increíbles.

Hubo algunas cosas que me decepcionaron durante mi estancia. En primer lugar, no me gustó que la casa funcionara como una Guest house y tuviera otras personas alojadas en diferentes habitaciones.

Ubicación con vistas a la montaña, zona de juegos para niños con piscina. Bañera en la habitación. Atención atenta de Luis, hizo nuestra estancia agradable. Recomendable.

El hotel tiene una ubicación privilegiada en medio de las montañas, lo que permite disfrutar de hermosas vistas panorámicas desde las habitaciones. Además, cuenta con habitaciones amplias y confortables, con camas cómodas y sábanas perfumadas. se destaca la atención cercana y amable del personal del hotel.

La falta de mosquiteras en las ventanas fue un inconveniente, ya que permitió la entrada de insectos molestos durante la estancia.