Genial! Este hotel rural en un pueblo tranquilo tiene vistas espectaculares, habitaciones limpias y acogedoras con chimenea y terraza soleada. El personal es amable y servicial, y el bar ofrece cenas deliciosas a buen precio. Ubicación perfecta para desconectar y hacer senderismo. ¡Días geniales de relax en la montaña! 😊

La casa es preciosa y está equipada con todo lo necesario. Las vistas desde las habitaciones son maravillosas y el entorno de montaña es perfecto para relajarse y hacer senderismo. La cama es cómoda y las sábanas están limpias y suaves. El propietario y su familia son atentos y disponibles para cualquier necesidad. Cerca hay sitios para comer y el río ofrece zonas de baño y rutas.

Me sentí inmediatamente como en casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Nos encantó nuestra estancia en Casa Rural La Riba Hostal. El apartamento era hermoso, bien mantenido y muy limpio. Tenía todas las comodidades necesarias para sentirnos como en casa. El entorno era excepcional, con rutas de senderismo y vistas espectaculares desde el apartamento. El dueño, Félix, fue muy amable y atento. Sin duda, volveremos a repetir en el futuro.

No pude encontrar ningún fallo en nuestra experiencia. 😊

Vistas espectaculares, actividades divertidas, wifi gratis. Lástima que la tele no funcionara, pero ¿quién necesita televisión con tanto por hacer?

La tele no se veía bien pero tampoco hizo falta.

¡Casa Rural La Riba es increíble! El anfitrión, Félix, es amable, cercano y cuidadoso. Nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. La casa es preciosa, completamente nueva y muy acogedora. La chimenea nos mantuvo calentitos y las camas eran muy cómodas. Los baños también eran fantásticos. Felix siempre estuvo dispuesto a ayudarnos y nos hizo sentir parte de la aldea. Las vistas desde la casa eran alucinantes y el pueblo era tranquilo y acogedor. Sin duda, un lugar con una energía y vibración muy especial. Siempre lo recordaré.

Nada de nada!

La estancia fue espectacular. El apartamento era precioso, con un amplio balcón y vistas impresionantes a la montaña. Estaba equipado con todo lo necesario, incluyendo tumbonas para tomar el sol y una barbacoa. El propietario fue muy amable y atento, facilitando todo lo que necesitábamos. Además, el bar que regenta en el pueblo era encantador. La ubicación del hotel era perfecta, cerca de diferentes rutas de senderismo y en un entorno tranquilo.

Todo fue maravilloso. Lo recomendamos sin dudarlo.

Nos encantó la ubicación privilegiada de este alojamiento. Está a poca distancia de los lagos y Covadonga, así como del parque nacional de Ponga. Además, en solo una hora en coche se puede llegar a cualquier parte de Asturias. disfrutamos de la tranquilidad y la paz del entorno, con el río cercano y diversas rutas para explorar. El pueblo cuenta con un bar donde nos atendieron amablemente y pudimos conseguir algunos productos básicos.

Hubiera sido mejor si hubiera un horno en el apartamento, pero no es algo imprescindible.