Irune, la anfitriona, hizo que me sintiera como en casa desde el primer momento. La habitación estaba impecable, con todos los detalles cuidados y un baño amplio. Además, las vistas a la marisma eran impresionantes y la ubicación era perfecta para visitar los alrededores. Irune fue muy atenta y amable, brindándome consejos sobre qué lugares visitar. Sin duda alguna, mi experiencia en Habitaciones Turísticas Ontxene fue inmejorable. ¡Muchas gracias por todo!

Nada que decir 😊

¡Una estancia increíble en Habitaciones Turísticas Ontxene! Nos quedamos en este encantador hotel durante una semana y fue perfecto para nuestras vacaciones. La ubicación es impresionante, con vistas impresionantes a la marisma. Disfrutamos de la tranquilidad y la limpieza impecable de las habitaciones. Además, el hecho de contar con parking gratuito fue una gran ventaja. Las habitaciones también tenían nevera, cafetera y microondas, lo cual resultó muy conveniente. El desayuno incluido era sencillo pero satisfactorio. ¡La relación calidad-precio fue insuperable!

Mi estancia en Habitaciones Turísticas Ontxene fue simplemente maravillosa. Desde el momento en que llegué, la dueña de la casa, Irune, me recibió con calidez y amabilidad. Ella me proporcionó toda la información necesaria sobre la zona y se aseguró de que me sintiera como en casa. La habitación era impecable, amplia y cómoda, con todas las comodidades que necesitaba. El baño también era espacioso y limpio. Además, la ubicación de la casa rural ofrecía unas vistas impresionantes. Sin duda alguna, volveré a Ontxene en mi próximo viaje.

Nada que mencionar. 🤷‍♀️

Tuvimos una estancia excepcional en Habitaciones Turísticas Ontxene. Las vistas a la marisma eran impresionantes y la amabilidad de la dueña, Irune, era destacable. La limpieza era excelente y teníamos un desayuno delicioso con música jazz de fondo en el comedor principal. Sin duda, un lugar para desconectar y disfrutar.

Un inconveniente que tuvimos fue el ruido proveniente de la habitación de arriba, donde se alojaban unos niños que no paraban de correr y saltar en la bañera. Esto rompía la tranquilidad del lugar y se escuchaba mucho desde abajo.