Desde el primer momento los dueños me hicieron sentir como en casa. Los platos del desayuno y la cena eran exquisitos, presentados de manera impecable y con un sabor delicioso. El aparcamiento estaba perfectamente asfaltado y vallado, lo que me daba tranquilidad. La ubicación era muy tranquila y me permitió disfrutar de la paz del entorno. Me encantó poder llevarme a casa las deliciosas mermeladas caseras. Las camas eran cómodas y espaciosas, y poder regular la calefacción en la habitación fue genial. Además, los amenities tenían una calidad muy buena y había una buena selección de libros para leer.

Nada que decir 😊

Me encantó la experiencia en este encantador hotel rural en un entorno tranquilo. Los anfitriones eran amables y siempre dispuestos a ayudar. La habitación era amplia y luminosa, con una cama muy cómoda. Además, disfruté mucho de los desayunos completos y las cenas de calidad que ofrecían. La ubicación del hotel era ideal, cerca de bonitos paisajes y rutas para explorar. Fue una escapada romántica perfecta para disfrutar de la naturaleza y relajarse.

En cuanto a las cosas que no me gustaron, la oferta de restaurantes en los alrededores era limitada y no había mucha información sobre ellos. Sería útil tener recomendaciones de lugares para cenar fuera del hotel.

Desde el principio, los dueños te hacen sentir como en casa. Los platos deliciosos. El aparcamiento seguro. La tranquilidad del lugar y la ubicación. Las mermeladas caseras. Las camas cómodas y amplias. La calefacción regulable y los amenities de calidad. Buena selección de libros.

Estuve feliz, no tuve ningún inconveniente.

El servicio de desayuno es muy completo, con productos de la zona y variado. La limpieza del hotel es impecable y las instalaciones son excelentes. El personal del hotel es amable y servicial. La ubicación en las montañas es encantadora.

Nada que pueda mencionar.

Mi estancia en el Hotel Rural Zalama fue increíble. Pasé un fin de semana fantástico en este encantador hotel rural. Los anfitriones fueron amables y siempre estuvieron disponibles con una sonrisa. El desayuno era completo y delicioso, con zumo, fruta fresca, bizcocho y tostadas, además de café e infusiones. Las cenas preparadas por Mª Cruz eran impresionantes, ¡todo estaba riquísimo! La música de fondo durante las comidas añadía un toque de lujo. La decoración rústica y acogedora de la casona contribuía a crear un ambiente tranquilo y relajante. Las habitaciones eran amplias, limpias y cómodas, especialmente las almohadas. Sin duda alguna, repetiré mi estancia en este maravilloso hotel.

Mi experiencia en Rural Zalama fue fantástica. La cocinera es muy talentosa, logrando platos deliciosos con ingredientes modestos. La decoración tanto en el interior como en el exterior es extraordinaria. Sin televisión y con una conexión wifi limitada, puedes desconectar del mundo y disfrutar de la tranquilidad.

Todo estuvo bien 👍🏼