Nos alojamos en un hotel increíble. La ubicación es perfecta, justo al lado del mar y al pie de una hermosa colina. La habitación era espaciosa y cómoda con un balcón con vistas impresionantes. El baño estaba impecable y tenía una ducha y una bañera. El personal fue muy amable y servicial, y el desayuno era delicioso, con una gran variedad de opciones. Además, el hotel tenía varias piscinas donde los niños disfrutaron mucho.

El desayuno y la cena son excelentes, el personal es amable y servicial. Ofrecen un pequeño refrigerio para los huéspedes que llegan tarde o se van temprano. Las carnes y vinos son recomendables. Los jardines, piscinas y zonas de recreación están bien cuidados. Hay entretenidos shows nocturnos.

La limpieza impecable, las amplias instalaciones del hotel y la amabilidad del personal son los mejores aspectos de mi estancia aquí. Además, la ubicación tranquila junto al mar y debajo de la colina, ofrece unas vistas impresionantes. El desayuno era delicioso y el estacionamiento fácil de encontrar. El transporte en esta ciudad también es conveniente.

Nada que disguste.

Me encantó mi estancia en este hotel durante las navidades. Lo mejor fue el desayuno, con una gran variedad de opciones para elegir. Además, la ubicación era ideal, cerca de la playa y rodeado de hermosos paisajes naturales. También disfruté de la tranquilidad del lugar, sin ruidos ni molestias. Sin embargo, me hubiera gustado que hubiera más indicaciones para encontrar mi habitación, ya que el hotel era bastante grande con varios edificios.

Buen desayuno, personal servicial, ubicación tranquila, vistas hermosas, jacuzzi relajante, habitaciones amplias y cómodas.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Me encantó mi estancia en este hotel durante las vacaciones de Navidad. Lo que más me gustó fue la tranquilidad y el ambiente relajado que se respiraba en el hotel. Además, las vistas a las Islas Malgrat y la cercanía al pinar le daban un toque especial. También disfruté mucho de la ubicación del hotel al final de la localidad, cerca de la montaña. Fue genial poder dar paseos y disfrutar de la naturaleza. Por último, la comida en el hotel fue excelente, tanto en el desayuno como en la cena. La variedad de platos y la presentación fueron estupendas. ¡Sin duda, una experiencia muy positiva!

En cuanto a los aspectos negativos, no me gustó que el spa estuviera cerrado durante el verano. Además, me hubiera gustado que hubiera más opciones de entretenimiento, como un billar.