Nuestra estancia fue increíble, nos encantó todo. El apartamento era alucinante, completamente nuevo, espacioso y súper limpio. Tenía todas las comodidades que necesitábamos, incluyendo una piscina climatizada que pudimos disfrutar en pleno diciembre. Estaba en un pueblo tranquilo pero cerca de Reinosa, perfecto para escapar de la ciudad. Lo mejor de todo fue la hospitalidad de Amaya, David y sus hijos. Nos permitieron visitar su granja y mis hijos se emocionaron al poder participar en sus actividades. Además, todos los días teníamos leche fresca de sus vacas, ¡qué delicia! Y no puedo dejar de mencionar el helado de queso, completamente casero y delicioso. Amaia y su familia son súper amables y te hacen sentir como en casa. Sin duda volveremos pronto.

El lugar es tranquilo y relajado, ideal para desintoxicarse de la ciudad. Las carreteras son buenas, así que no hay preocupación por el mareo. Los propietarios son un encanto y te hacen sentir como en casa. Hay varias estancias, todas muy cuidadas y perfectamente equipadas. Además, la disponibilidad de una piscina cubierta te permite disfrutar de un baño en cualquier época del año.

La conexión wifi no funcionaba, lo cual puede ser un inconveniente si se necesita estar conectado todo el tiempo.

Nos encantó la tranquilidad y la belleza de la naturaleza que rodea este alojamiento. La piscina y las vistas al pantano fueron definitivamente lo mejor de nuestra estancia. Además, tener la oportunidad de visitar la granja y participar en la vida diaria de los propietarios fue una experiencia única. Aprendimos mucho sobre la ganadería y pudimos ordeñar vacas y probar productos lácteos frescos y deliciosos.

El apartamento era muy amplio y cómodo, con todas las comodidades necesarias. Además, la tranquilidad y el silencio de la zona eran maravillosos. Disfrutamos mucho de la piscina, que estaba muy caliente. Además, el personal fue realmente encantador, y nos ofrecieron leche fresca de las vacas y nos hicieron una visita guiada por la granja, que fue muy interesante y divertida.

Lo único negativo que puedo mencionar es que el pueblo es muy pequeño y no hay supermercado ni otros servicios cerca. Por lo tanto, es necesario ser previsor y llevar todo lo necesario antes de llegar.

Genial piscina climatizada y lechería. Montar en pony y probar deliciosos helados caseros. Familia encantadora y acogedora. Espacioso apartamento con calefacción. Leche fresca diaria. 😊

La atención y amabilidad de los dueños fue excepcional, especialmente con los niños. Tienen actividades interactivas con animales, como ordeñar vacas y montar en poni y burra. El apartamento estaba completamente equipado y adaptado para personas con movilidad reducida. También disfrutamos de la piscina cubierta, perfecta para bañarse durante todo el año.

Me sentí como en casa, no me puedo quejar.

Mi estancia en El Palacio del Campo en Servillas fue increíble. Me alojé en un apartamento amplio y perfectamente equipado, adaptado para personas con movilidad reducida. ¡La piscina cubierta fue una maravilla, pudiendo disfrutar del baño en cualquier época del año! Además, el trato de los anfitriones, Amaya y David, fue excelente.