Mi estancia en Espahotel Plaza de España fue increíble. La habitación era simplemente fantástica, con amplias vistas a la Plaza de España y una kitchenette funcional que me permitió la autonomía deseada. Además, la ubicación estratégica me permitió estar cerca de lugares emblemáticos como la Gran Vía y Plaza de Callao.

Al regresar al final del día, noté un ligero olor a humedad en la habitación, lo cual fue un poco desagradable. Sin embargo, no opaca la experiencia general pues el resto del alojamiento fue excelente.

Siempre regreso a este lugar. El personal me ayudó con las tarjetas sim la primera vez. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, recepción las 24 horas, restaurante, lavandería. Volveré para Pascua.

Ubicación ideal para explorar Madrid

La ubicación del hotel es ideal para explorar Madrid, cerca de la Gran Vía pero sin el bullicio de la multitud. El personal de recepción fue amable y resolutivo, atendiéndonos perfectamente. Es cómodo para viajar en familia, con habitaciones triples espaciosas y una pequeña cocina práctica.

Las habitaciones están equipadas con una cocina funcional, lo que hace más sencillo el día a día. Recuerdo una mañana en la que preparé un desayuno casero y disfruté de una taza de café viendo las espectaculares vistas de la ciudad desde la ventana. Fue como tener mi propio programa de cocina con vistas panorámicas.

La habitación necesitaba actualizarse.

Ubicación ideal, comodidad de la habitación, amabilidad del personal, calidad de las camas y la ducha, cocina separada, parking conveniente.

Mejor imposible.

Me encantó la ubicación del hotel, justo en frente de una gran plaza y muy cerca de una calle principal. Fue genial poder caminar fácilmente a todos los lugares de interés turístico de la ciudad. Además, el personal del hotel fue muy amable y servicial, siempre dispuesto a brindar recomendaciones y ayudar con cualquier solicitud. Por último, disfruté de la comodidad de la habitación, que era espaciosa y tenía una pequeña cocina, lo que facilitó la preparación de comidas rápidas.

Lo que no me gustó fue la decoración del hotel, que se veía bastante antigua y desgastada. me decepcionaron las condiciones de algunas partes de la habitación, como la tapadera de las llaves de luz y agua que se caía constantemente, dejando un agujero en la pared.

Me alojé en el Espahotel Plaza de España solo durante mi tránsito en Madrid y me resultó muy conveniente tener acceso a la línea 8 del Metro desde los terminales T1, T2, T3 y T4 del aeropuerto hasta la estación de Nuevos Ministerios. Además, el hotel se encuentra a solo 5 minutos a pie de la estación de metro Plaza de España, lo que hizo que mi viaje fuera aún más fácil.

En teoría, el hotel tiene aparcamiento, pero no fue posible encontrar la entrada ya que se debe llegar desde el túnel, lo que nos obligó a aparcar en el aparcamiento público de la Plaza de España, que resultó ser bastante caro.

Nuestra estancia en Espahotel Plaza de España fue fantástica. La ubicación es excelente para explorar la ciudad y disfrutar de todas las atracciones turísticas. Además, el personal de recepción nos atendió de manera muy amable y nos hizo sentir bienvenidos desde el momento en que llegamos. La habitación era amplia y cómoda, con unas vistas maravillosas a la Plaza de España. También contaba con una pequeña cocina, lo cual fue muy conveniente para nosotros, especialmente al viajar con niños. Sin duda, esta fue una opción de alojamiento muy acertada en una zona privilegiada de la ciudad.

Nada, todo estuvo bien! Todo en nuestra estancia en Espahotel Plaza de España fue excelente y no tenemos ninguna queja.

La ubicación cercana al centro de la ciudad y al Palacio Real es excelente. Además, este hotel está situado cerca de una estación de metro, lo cual facilita mucho el transporte. destacamos la limpieza impecable de las habitaciones y las instalaciones del hotel. Por último, el desayuno ofrecido por el hotel fue delicioso y el personal fue amable y servicial.

Nada, todo es maravilloso.

Nos encantó la ubicación en la Plaza de España, con fácil acceso a pie a los lugares emblemáticos del centro de la ciudad. El personal de recepción fue amable y atento, y el servicio de parking fue muy conveniente. Sin duda, volveremos a hospedarnos en este lugar.

La ubicación es simplemente increíble, cerca de todo lo que quieres ver y hacer. El personal es súper amable, ¡y la habitación que me dieron era absolutamente fantástica! Limpieza impecable, TV enorme y esos detalles extra en la nevera fueron alucinantes. El desayuno en la cafetería de al lado fue una experiencia increíble, y la atención de Sandra y el equipo fue alucinante. Definitivamente una estancia estelar.

La ubicación del hotel es perfecta, justo enfrente de la Plaza de España y a pocos pasos de la Gran Vía. Además, pudimos caminar fácilmente por el centro y visitar los lugares turísticos más importantes.

Aunque hubo algunos aspectos negativos, como un peluche olvidado que no pudimos recuperar y el ruido molesto de las labores de limpieza durante la madrugada, en general nuestra experiencia fue positiva. El personal del hotel fue amable y la limpieza de las instalaciones fue impecable.

estuve en un hotel en madrid y esta vez me alojé en el Espahotel Plaza de España. La ubicación es excelente, con una estación de metro a pocos pasos y fácil acceso a todo. Las habitaciones son cómodas y limpias, y el personal es amable y servicial.

Faltaban enchufes cerca de la cama.

Durante nuestra estancia en Espahotel Plaza de España, disfrutamos de una ubicación excelente frente a la Plaza de España y a solo una cuadra y media de la Gran Vía. El personal de recepción fue sumamente amable y atento, brindando un trato excelente. La habitación era amplia y contaba con una kitchenette, lo cual resultó muy útil para disfrutar de comidas en el dormitorio. La cama y el baño eran de dimensiones correctas y el precio del desayuno buffet, €8,20, era muy bueno. Además, el hotel cuenta con un estacionamiento público justo al lado, lo que facilitó nuestro transporte. En general, recomendaría este hotel.

Disfruté de unas vistas espectaculares desde la habitación, con el Palacio Real a poca distancia. Además, me encantó la amabilidad del personal, siempre dispuesto a ayudar. La cafetería ofrecía un buffet de desayuno variado y delicioso, que fue el punto culminante de mis mañanas.

La habitación tenía moqueta en el suelo, que, aunque no estaba sucia, preferiría sin ese tipo de suelo por motivos de higiene.