Nos encantó la atención del personal, siempre pendientes de nuestro bienestar. La habitación era impecable y contaba con todos los servicios necesarios. La ubicación era perfecta, cerca de hermosos lugares para visitar. El desayuno fue delicioso y variado.

Na.

La atención del anfitrión fue excepcional, siempre pendiente de que nuestra estancia fuera perfecta. El entorno de la finca es precioso, rodeado de flores, plantas y árboles, ¡incluso hay pavos reales! Además, el alojamiento tiene una relación calidad-precio excelente. Está bien equipado, con todo lo necesario, y cuenta con parking. Además, se encuentra cerca de varios bares, restaurantes, miradores y supermercados. Incluso hay un mercadillo y música en la zona los viernes. El pequeño Silvestre, el guardián de La Pérgola, nos alegró cada día.

Recomendaría el lugar sin duda alguna.

Me alojé en Finca La Principal Villa durante una semana para explorar la isla y hacer senderismo. Me encantó la ubicación de la finca, rodeada de un hermoso jardín bien cuidado y exuberante. Los propietarios, Egle y Jorge, fueron encantadores y siempre dispuestos a proporcionar información sobre rutas y lugares para visitar. La suite en la que me hospedé era espaciosa, con un estilo colonial encantador y una cama muy cómoda. El desayuno, que se servía en el jardín, era delicioso y personalizado según mis preferencias. Además, la finca está cerca de un excelente restaurante. Recomiendo este lugar insistentemente.

Recomiendo este lugar insistentemente.

Nos encantó nuestra estancia en esta finca mágica! La ubicación era perfecta, cerca de restaurantes deliciosos y tiendas encantadoras. Además, el entorno natural era simplemente impresionante, rodeado de exuberante vegetación y animales adorables como pavos reales y un divertido pato. Los propietarios fueron increíblemente amables y serviciales, dándonos consejos sobre lugares para visitar en la isla. nos encantó la privacidad y la amplitud del baño, que aunque estaba a unos 15 metros de la habitación, estaba bien iluminado y muy limpio.

Quizás el único inconveniente fue no tener una pequeña cocinita y una televisión en la habitación, especialmente para las noches frías en las que no podíamos estar afuera. Sin embargo, esto no opacó en absoluto nuestra experiencia y definitivamente volveríamos.