Estuve en Fonda Ca La Manyana durante tres días en un viaje de placer. La habitación era fácil de encontrar y espaciosa. El personal fue muy amable y atento. No teníamos desayuno incluido, pero nos proporcionaron una botella de ratafía y café en la habitación. El lavabo era amplio y la estancia superó nuestras expectativas. Muy recomendable para disfrutar de la tranquilidad y todos los servicios de la ciudad de Vic a solo 5 km de distancia. El entorno y la oferta gastronómica eran excelentes.

Super recomendado.

La habitación era espaciosa y cómoda, con un baño nuevo y bien funcionamiento. La atención del personal fue excelente y se preocuparon por todos los detalles en la habitación. Además, el desayuno fue completo y con productos de gran calidad. También, me gustó que el hotel ofrecía facilidades para guardar bicicletas. Por último, este pueblo es muy tranquilo y limpio, con hermosa naturaleza y arquitectura románica.

No hay nada que no me haya gustado.

La amplitud y comodidad de las habitaciones es destacable. Relación calidad-precio competitiva. Estilo barroco y cuidado. Personal atento y amable. Desayuno completo y presentado. Ubicación tranquila y cerca de parque natural y de una ciudad con oferta gastronómica y comercial.

Que no pude quedarme más tiempo.

Me ha encantado mi estancia en este lugar. Lo mejor fue la amplia habitación con una decoración encantadora. También me gustó mucho la ubicación, cerca de un parking público y en un pueblo encantador. Además, el wifi era rápido y confiable, lo cual fue muy conveniente. Sin duda, volvería a quedarme aquí.

En cuanto a las cosas que no me gustaron, el único aspecto negativo fue la falta de presión de agua en la ducha. Fue un poco incómodo ducharse con tan poca presión.

La instalación es perfecta, situada en una población tranquila. El personal es excelente y muy educado. La ubicación es excelente, cerca del parque y el Pantà de Sau. Habitación espaciosa con baño nuevo. El personal fue amable y servicial. El pueblo es tranquilo y limpio. Destacan la naturaleza y el arte románico.

Me sentí cómodo, no tengo ninguna queja.

Las habitaciones son grandes, cómodas y muy limpias. La cama es muy cómoda y el baño es espacioso. Además, la ubicación del hotel es perfecta para disfrutar de la tranquilidad y hacer excursiones por la montaña. El desayuno es completo y el personal es amable.

Todo fue maravilloso.

mi segunda estancia en Sant Juliá de Vilatorta superó mis expectativas. Me encantó el encanto antiguo de la fonda y la comodidad de la habitación con todas las comodidades. El ambiente tranquilo y relajante en todo el establecimiento fue maravilloso. El desayuno y el bufé al mediodía fueron abundantes y variados. Definitivamente volveré.

La ventana de la habitación no cerraba bien y se escuchaba el ruido de los coches. No pudimos usar el wifi porque no nos dieron la clave de acceso.