habitaciones acogedoras, decoración moderna, cama cómoda, baño limpio, personal amable, instalaciones estupendas.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Me sentí como una reina en este castillo. La comida del restaurante era tan deliciosa que me hubiera comido hasta las paredes. El personal me trató tan bien que casi me creía famosa.

Qué pena que no fuera un spa, así podría haberme relajado aún más.

**Lo mejor**

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estancia en este hotel. Primero, el servicio fue deficiente, especialmente durante el desayuno.

El hotel Hospederia La Querencia fue una grata sorpresa durante nuestra estancia en Bujalance. Nos encantó la decoración acogedora y el contraste entre lo antiguo y lo moderno en la decoración y el mobiliario de las habitaciones. Todo era muy cómodo y acogedor, lo cual hizo que nos sintiéramos como en casa. Además, la ubicación del hotel era excepcional, ya que se encontraba en pleno centro del pueblo. También disfrutamos de las diferentes opciones de entretenimiento que ofrecía el hotel, como el restaurante, el bar, la bodeguita y la terraza. Incluso descubrimos que tenían una discoteca en el sótano, donde nos lo pasamos genial con el barman Manolo. En definitiva, altamente recomendable.

No tenemos ninguna queja sobre nuestra estancia en Hospederia La Querencia. Nada, ninguna queja.