Mi estancia en este hotel fue una aventura inolvidable. Desde el desayuno con vistas al mar hasta las actividades culturales en la región, todo fue fascinante. Recorrí el triángulo Dalí en bicicleta y descubrí maravillosas calas escondidas. El personal era tan amable que me sentí como en casa, ¡incluso organizando un banquete improvisado! Recomiendo este lugar para una escapada relajante y llena de sorpresas. ¡Y sí, también probé el golf!

Me encantó la decoración del hotel, especialmente la terraza con vistas al mar. Los espacios comunes estaban muy bien decorados y acogedores, con sillones cómodos para descansar. Además, me alegró ver que el hotel era accesible para personas mayores, con ascensores y pasillos amplios que facilitaban la movilidad.

Me gustaría que hubiera un poco más de ayuda para las personas mayores, especialmente con el equipaje. A veces, los chicos que trabajan allí estaban ocupados y no podían brindar la asistencia necesaria para que los huéspedes mayores se sientan más cómodos.

El desayuno es estupendo, ¡podría pasarme el día comiendo croissants en la terraza! Las arcadas en la playa son geniales para mantenerse a la sombra y contemplar el mar. El Triángulo Dalí es una experiencia interesante.

Hacer la cama con una manta vieja fue el toque chic del hotel.

Lo mejor de nuestra experiencia en la pascua fue la ubicación privilegiada del hotel, justo en primera línea de mar. disfrutamos mucho de las impresionantes vistas que teníamos desde nuestra habitación. Además, nos encantó la limpieza impecable de las instalaciones.

Algunos platos resultaron insípidos y repetitivos en sabores. nos pareció que los precios en el bar eran bastante elevados, lo cual nos hizo sentir que nos estaban aprovechando un poco.

Buena ubicación y vistas impresionantes desde la terraza. El desayuno buffet de este hotel es excelente, con una gran variedad de productos de calidad. Además, las habitaciones son espaciosas y cuentan con amenidades exclusivas que brindan una experiencia de lujo. El servicio del personal es profesional y amable, siempre dispuestos a ayudar.

El único inconveniente que encontré fue un ligero ruido molesto en la habitación que afectó mi descanso durante la noche. Sin embargo, este problema fue mínimo en comparación con todas las ventajas y comodidades que ofrece este hotel.

Ubicación privilegiada frente al mar. Habitaciones reformadas y cómodas, con WiFi gratuito. Desayuno amplio y variado en terraza con vista al mar. Personal atento y amable. Duchas de cortesía para después de la playa.

Nuestra estancia en Hostalillo fue perfecta. El hotel está situado al lado de la playa, con unas vistas impresionantes. Las habitaciones son muy bonitas y se encuentran en un excelente estado de cuidado. La comida en el bar era buenísima y el personal del hotel nos trató de manera excelente. Realmente fue un sitio ideal para relajarse y disfrutar del paso del tiempo. Además, la excursión al faro de Sant Sebastián y un baño en cala Pedrosa son imperdibles. En resumen, una excelente combinación de calidad y precio.

Nada de nada. 🙌

Me encantó este hotel junto a la playa. La habitación tenía unas vistas increíbles y estaba muy luminosa. Además, el baño recién reformado era muy moderno. El personal del hotel fue muy amable y servicial durante toda nuestra estancia. El desayuno era delicioso y el restaurante ofrecía comida de buena calidad. Además, pudimos disfrutar de las maravillosas terrazas del hotel, donde pudimos tomar algo y relajarnos mientras disfrutábamos de las vistas. ¡Una experiencia fantástica!

La puerta del garaje era algo antigua y manual, lo cual resultaba un poco incómodo.

En esta época, la relación calidad-precio es excelente. Me encantó la cercanía a la playa, la limpieza de la habitación y la amabilidad del personal, especialmente Eduard de recepción. Las instalaciones del hotel eran modernas y acogedoras, con un ambiente tranquilo ideal para disfrutar en familia. La ubicación cerca de lugares como la Playa El Cau y la Cueva de En Gispert permitió a mi hija y a mí explorar y relajarnos juntas, fortaleciendo nuestro vínculo familiar. A pesar de algunas pequeñas incomodidades con el ruido y el estacionamiento, la experiencia general fue muy positiva y memorable. Sin duda, recomendaría Hotel Hostalillo para unas vacaciones familiares relajantes y enriquecedoras.

Ubicación perfecta, habitación grande y cómoda, personal amable, comida variada y de calidad.

No puedo encontrar nada malo.

Este hotel tiene una ubicación maravillosa, justo en frente de la playa. Las habitaciones son espaciosas y cuentan con fantásticas vistas al mar. Además, el desayuno incluido es muy completo y se puede disfrutar con una hermosa vista.

Todo estaba bien.

Disfrutamos de la ubicación ideal del hotel, frente al mar, perfecto para recorrer la impresionante costa de Palafrugell, con sus encantadoras calas y vistas panorámicas. Las actividades al aire libre, como buceo y kayak, crearon recuerdos inolvidables para toda la familia.

Mi mujer dice que sería útil ofrecer actividades supervisadas para niños.

La ubicación del hotel es inmejorable, ya que está justo en frente de la playa. Es genial poder levantarte y tener el mar a pocos pasos de distancia. Las habitaciones son excelentes, especialmente si tienes la suerte de quedarte en el último piso con vistas a la ciudad y al mar. La vista desde allí es increíble y las habitaciones son amplias y bien decoradas.- El desayuno servido en este hotel es excelente, con una gran variedad de opciones para elegir. El personal es muy amable y servicial, asegurando que todos los huéspedes estén satisfechos con su comida.

Todo estuvo bien.

Ubicación excelente, vistas espectaculares, personal agradable, tranquilidad, comodidad.

Nada, todo excelente.

Las amplias terrazas con vistas panorámicas hicieron que cada mañana disfrutara de un desayuno con vistas al mar, creando un ambiente de ensueño. Sentado en el Snack-Bar Mirador, con croissants y una taza de café, me sentía como un aristócrata disfrutando de la vida.

Ruido del aire acondicionado.