Este hotel ofrece una relación calidad-precio inmejorable. Los precios son asequibles y los servicios son de calidad. Destaco especialmente la atención a los detalles, como el agua y el café gratuitos disponibles las 24 horas. Además, la ubicación en el casco antiguo de la ciudad es perfecta para explorar los alrededores.

Todo fue genial.

El lugar donde está situado es perfecto, en el corazón de la ciudad. Todo está cerca y se puede llegar caminando a las atracciones turísticas. Además, el transporte público está a solo 5 minutos para subir a la Alhambra. ofrecen un delicioso desayuno y té por las tardes en un encantador patio interior. Las habitaciones son cómodas, con amenidades de baño de alta calidad. Incluso te ofrecen té en la habitación y tienen ascensor para mayor comodidad.

El único inconveniente es que el hotel puede ser difícil de encontrar, especialmente si vas en auto. Además, no cuentan con un estacionamiento cercano, lo que puede ser una molestia si llevas muchas maletas y no quieres caminar mucho.

Mi estancia en Casa 1800 fue simplemente perfecta. La ubicación es fantástica, en el corazón del Albaicín, y a solo 15 minutos a pie de la entrada a la Alhambra. A pesar de estar tan céntrico, no había ruidos molestos y pudimos disfrutar de una merienda cortesía del hotel. La decoración, especialmente el patio interior andaluz, fue algo que nos encantó. Además, el personal del hotel fue muy amable y profesional en todo momento.

Personal amable, ubicación ideal, habitación con vistas espectaculares, edificio histórico, merienda de cortesía.

La ubicación excepcional. El hotel es precioso, tiene un patio interior donde desayunar o merendar súper agradable. Que te inviten a merendar es un detalle que no he visto en otros hoteles. La decoración preciosa, te traslada a otra época. A pesar de tener las ventanas al patio interior, la habitación era suficiente para una estancia corta.

Ubicación perfecta, personal amable, servicio de refrigerio todo el día, desayuno completo, habitaciones con encanto.

Nada, es perfecto.

El hotel se encuentra en una ubicación ideal, cerca de muchos buenos restaurantes y en una zona tranquila. Además, está convenientemente ubicado cerca de todos los lugares de interés y realmente cerca del centro. Las habitaciones están decoradas al estilo antiguo y el baño es perfecto. El servicio es atento y el desayuno es completo, servido en un encantador patio. También ofrecen agua y café todo el tiempo, así como una merienda por la tarde.

Quizás el único aspecto negativo es que las habitaciones pueden ser un poco pequeñas y tener poca luminosidad al dar al patio.

Recientemente nos alojamos en Casa 1800 y fue una experiencia increíble. Elegimos este hotel para nuestra noche de bodas y los días siguientes, y no podríamos haber hecho una mejor elección. El personal fue super amable y atento, incluso nos sorprendieron con una botella de champán y una felicitación al llegar. El hotel en sí es simplemente precioso, con un encanto especial y atención al detalle en toda la decoración. Además, la ubicación es perfecta, justo al lado del Paseo de los Tristes y con vistas a la Alhambra. Definitivamente, una opción ideal si buscas algo romántico y especial.

Recomiendo este lugar insistentemente.

Este hotel es simplemente espectacular. Encontré una gran relación calidad-precio y me encantaron los pequeños detalles que hacen la diferencia. Por ejemplo, el personal fue amabilísimo y siempre estuvo dispuesto a ayudar en todo momento. Además, la ubicación en el casco antiguo de la ciudad fue perfecta para explorar los principales lugares de interés. Las habitaciones son muy acogedoras, especialmente las que tienen una terraza y ofrecen vistas increíbles. Definitivamente vale la pena mencionar el desayuno incluido, que fue delicioso.

Todo estaba fenomenal.

Me encantó la atención al detalle, desde la exquisita decoración hasta el encantador patio interior. Además, el servicio del personal fue extraordinario, siempre preocupados por hacer nuestra estancia lo más agradable posible. Sin olvidar la merienda diaria, con una gran variedad de café, té y deliciosos bocadillos. Todo esto en una ubicación inmejorable en el casco antiguo de la ciudad, a pocos pasos del centro. me encantó la habitación con terraza y vistas espectaculares, junto con una cama doble súper cómoda. ¡Y por si fuera poco, el desayuno estaba incluido!

En líneas generales, todo estuvo de maravilla.

Servicios gratuitos de merienda, infusiones y agua embotellada. Detalle de bienvenida con botellita de cava y copitas.- Trato excelente del personal del hotel.- Ubicación ideal, sin ruidos y cerca de la Alhambra y el Albaicín.- Aperitivos de media tarde.- Casona del siglo XVI reformada con encanto.- Habitación correcta, elegante y tranquila.- Desayuno agradable en el patio interior.

Todo fue perfecto.

El trato excepcional, amabilidad del personal, detalles encantadores, ubicación perfecta para turismo.

Para ser sincero, nada que no me haya gustado.

Este hotel es una joya escondida en el corazón de la ciudad. Me encantó la atención al detalle en la decoración de las habitaciones, especialmente la habitación con terraza y vistas espectaculares. La ubicación en el casco antiguo nos permitió disfrutar de todos los lugares de interés a pocos minutos de distancia. Además, el personal fue extremadamente amable y servicial, y el desayuno incluido fue delicioso.

Todo estuvo genial.

Nos alojamos en Hotel Casa 1800 y quedamos encantados con la belleza del lugar. Las habitaciones estaban decoradas con mucho gusto y eran muy cómodas. El personal del hotel fue amable y atento en todo momento. Además, la ubicación del hotel era perfecta, cerca de todo lo que queríamos visitar en Granada.

Mi estancia en este hotel fue increíble! El hotel está ubicado en el casco antiguo de la ciudad, en el corazón de la ciudad, lo que hace que sea conveniente para visitar los principales puntos de interés. Las habitaciones estaban impecables y las instalaciones del hotel eran de primera clase. Además, el desayuno era delicioso y variado, y el personal era amable y servicial.

Nada en absoluto de lo que quejarse.