En resumen, a pesar de estos pequeños inconvenientes, mi experiencia en este hotel fue muy positiva. La tranquilidad, las vistas al mar y el aparcamiento fueron los puntos destacados de mi estancia. Definitivamente recomendaría este lugar a otros viajeros.

Me encantó mi estancia en este hotel durante un fin de semana. Los mejores aspectos del hotel fueron la tranquilidad y las vistas al mar.

Me encanta este hotel porque está en el centro de la ciudad, cerca de todas las atracciones turísticas. Además, la parada de autobús está muy cerca, lo que facilita los desplazamientos. Las habitaciones son cómodas y limpias, con unas vistas maravillosas hacia el mar. El desayuno es fantástico, con una variedad de productos caseros. El personal es muy amable y siempre dispuesto a ayudar.

Lo único negativo es que el aparcamiento no es gratuito.

Me gustó mucho mi estadía en este hotel durante la Navidad. Lo que más me gustó fue la amabilidad del personal, siempre dispuestos a ayudar y hacer que me sintiera como en casa. me encantó la ubicación del hotel, ya que estaba cerca de la playa y tenía unas vistas increíbles del mar. Además, el hecho de que hubiera un autobús que conectara con el centro de la ciudad fue muy conveniente.

Como aspecto negativo, debo mencionar que en algunos puntos del pasillo el suelo hacía ruido al caminar y se podían oír los pasos de los demás clientes. Esto fue un poco molesto en momentos puntuales.

Estuvimos encantados con nuestro reciente alojamiento en Leku Eder. Aunque el hotel está situado en el monte Igeldo, encontramos muy conveniente la parada de autobús justo enfrente del hotel, que nos llevaba al centro de Donostia. Además, el personal, especialmente Iñaki y Ana, fueron muy amables y nos proporcionaron toda la información turística que necesitábamos. Las habitaciones eran espaciosas y la cama era muy cómoda. La limpieza también fue impecable. En cuanto a la relación calidad-precio, considerando la ubicación, fue excelente.

Si tuviéramos que mencionar algo negativo, diríamos que sería ideal contar con dos almohadas en lugar de una. Sin embargo, esto no es un problema importante en comparación con todo lo demás que ofrece el hotel.

Mi estancia en este hotel fue estupenda. Está un poco alejado del centro, pero eso no fue un problema ya que tienen una línea de autobús que pasa cada 25 minutos justo enfrente del hotel. Por solo 1,75€ pude llegar fácilmente al centro de la ciudad.

El hotel está en una zona tranquila junto a la naturaleza, cerca del parque de diversiones. La habitación es amplia y el baño bastante grande. Además, el personal es amable y ofrece información útil para visitar la ciudad.

El desayuno es flojo.

Fui de ocio y me hospedé en Leku Eder durante mi estancia de tres noches. Desde el momento en que llegué, el personal fue extremadamente amable y el trato excepcional. Me asignaron una habitación con vistas al mar, que eran impresionantes. El hotel en sí era muy acogedor con una sala común muy confortable y tenía todo lo que necesitaba, como café, infusiones y bollería, todo gratis. Además, el personal siempre estuvo pendiente de ayudar y fueron especialmente atentos y cariñosos con mi bebé. Sin duda, volveré a repetir mi estancia aquí y se lo recomendaría a todos.

Insisto, este lugar es super recomendado.

Hotel Leku Eder es un lugar ideal. Estuve hospedado por una semana y pude disfrutar de todo lo que ofrece este encantador hotel. La ubicación es perfecta, con parquing disponible y parada de autobús justo en frente, lo que nos permitió movernos fácilmente por la ciudad. El personal fue lo mejor, siempre dispuestos a ayudar y dándonos recomendaciones de lugares preciosos para visitar. Las vistas desde la habitación eran espectaculares y la habitación en sí era grande y limpia, sin ningún ruido molesto. Recomiendo este fantástico hotel, es realmente ideal.

Vistas preciosas. Habitaciones confortables.Terraza con vistas al mar.Parking práctico.Personal amable.Buen desayuno.Buena ubicación cerca del parque y mirador.Parada de autobús frente al hotel.

El lugar es simplemente increíble. Desde nuestra habitación, pudimos disfrutar de unas vistas impresionantes. Además, la ubicación del hotel es perfecta, con una parada de autobús justo en frente que nos llevaba al centro de la ciudad en poco tiempo. La habitación era espaciosa y estaba impecablemente limpia, con camas cómodas y un baño completamente equipado. apreciamos el servicio de recepción las 24 horas y la oferta de café y té gratis. Sin duda, volveríamos a alojarnos aquí.

Hubo un ligero olor a humedad en la habitación y la presión de la ducha era un poco baja. Sin embargo, estos detalles no afectaron de manera significativa nuestra estancia.

La ubicación del hotel es ideal para aquellos que viajan en auto, ya que cuenta con un amplio estacionamiento gratuito. Las vistas desde el hotel son impresionantes, con el mar Cantábrico como telón de fondo. Además, el hotel ofrece conexión fácil en autobús con el centro de la ciudad, lo que hace que sea conveniente visitar los principales puntos de interés sin necesidad de usar el auto. El personal del hotel es muy amable y atento, y el desayuno buffet es abundante y delicioso, especialmente los bizcochos caseros. En general, recomendaría este hotel sin duda alguna.

Aunque el hotel ofrece autobuses al centro de la ciudad, algunas personas pueden encontrar que está un poco lejos del centro. Además, los servicios de restaurante son limitados, lo que puede ser una desventaja para aquellos que deseen disfrutar de una comida completa en el hotel.

El hotel está ubicado en las afueras de la ciudad, pero cerca de la parada de autobús que te lleva al centro en poco tiempo. Las habitaciones son amplias, limpias, con camas cómodas y buenos baños. Además, el desayuno es completo y delicioso, y el personal es muy amable y atento. El hotel también cuenta con parking gratuito.

El horario del último autobús desde el centro de la ciudad es un poco temprano, lo cual puede limitar la flexibilidad de los huéspedes para disfrutar de la vida nocturna de la zona.

Nos encantó la ubicación del hotel al lado del océano y la vista increíble que teníamos desde nuestra habitación. Además, el transporte en esta ciudad fue muy conveniente, ya que había una parada de autobús justo al lado del hotel y el funicular estaba cerca. el personal fue muy amable y nos brindó información útil sobre la zona y recomendaciones de restaurantes. El desayuno fue genial, con una gran variedad de tartas caseras.

No hay nada que no nos haya gustado.

Nos alojamos en un hotel encantador en un lugar precioso, justo al lado del océano. La ubicación era perfecta, cerca de la parada de autobús, lo que nos facilitó el desplazamiento por la ciudad. La habitación era amplia y el baño también. El personal nos brindó una excelente atención, dándonos consejos y recomendaciones sobre la ciudad. Además, disfrutamos de un delicioso desayuno con una vista increíble de la montaña y el mar. El hotel también contaba con diversas instalaciones, como un salón común y un jardín trasero con columpios.

El trato del personal, ubicación cerca del funicular y la playa, aparcamiento gratuito, vistas desde la habitación, recomendaciones del personal, limpieza.

Todo bien.