Tranquilidad y amabilidad del personal. Habitaciones limpias y modernas. Ubicación ideal para hacer senderismo y visitar la zona. Desayuno excelente y piscina agradable.

Me alojé en el precioso Hotel Rural Abadía de Yuste durante un viaje de placer. Nuestra estancia fue de varios días y nos encantó cada aspecto del hotel. El edificio antiguo era encantador, con sus patios llenos de plantas y flores, y la fuente que caía por una pared de piedra era realmente especial. Además, las habitaciones eran como pequeños apartamentos, amplias y luminosas, con todas las comodidades que necesitábamos. El personal del hotel fue extremadamente amable y servicial, y todas las instalaciones estaban limpias y bien cuidadas.

De verdad que lo recomiendo.

Me encantaron las instalaciones y la atención del personal, especialmente Alba, la recepcionista. El restaurante ofrece comida excelente con productos de la tierra y el edificio tiene un potencial enorme. El desayuno fue increíble y nos regalaron un bote de pimentón de la Vera al pagar. Todo por un precio muy razonable.

Me sentí genial, no tengo ninguna razón para quejarme.

Ubicación excelente, personal encantador, desayuno completo, almuerzo de menú de buena calidad. Volveremos. Encantador sitio, balconadas de madera, patio con fuente, habitaciones amplias y cómodas. Personal amable y servicial. Ideal para disfrutar del valle y descansar sin ruidos. Magnífico servicio y amabilidad, con detalles apreciados. Habitaciones amplias, camas cómodas, duchas potentes. Fantástico desayuno con surtido de comida y opción de pedir a la carta. Cena estupenda. Personal amable y simpático.

Nos encantó la amplitud y comodidad de las habitaciones, así como el encanto del hotel en general. El patio interior con balcones de madera era precioso y le daba un ambiente especial. Además, la ubicación del hotel era magnífica, muy cerca del Monasterio y rodeado de una naturaleza impresionante. El desayuno fue espléndido, con una gran variedad de productos para elegir. El personal fue muy amable y eficiente, dispuesto a ayudar en todo lo que necesitábamos.

Ningún fallo.

El hotel tiene una ubicación céntrica en el pueblo, es fácil de encontrar y se puede aparcar en la calle sin problema. El personal es muy amable y siempre está dispuesto a ayudar. Las habitaciones son grandes y cómodas, con una nevera grande y un buen colchón. El desayuno es suficiente y el entorno del hotel es precioso, con vistas al patio lleno de plantas. También hay una piscina para refrescarse en los días calurosos.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna razón para quejarme.

La ubicación del hotel es perfecta para explorar la zona, cerca de todo en la comarca y al pie de un famoso monumento. Las habitaciones están alrededor de un bonito patio, son tranquilas y espaciosas. Me encantó que mi habitación tuviera dos ventanas y una terraza, lo que permitía una excelente ventilación. Además, el desayuno fue muy bueno, con una máquina de café en la habitación y botellas de agua de cortesía. También debo mencionar la amabilidad y profesionalidad del personal, especialmente de Alba, siempre pendiente de que los huéspedes estén cómodos.

El hotel tiene demasiados escalones, lo cual puede ser incómodo para personas con movilidad reducida, aunque cuenten con ascensor y plataforma elevadora para sillas de ruedas. Además, las camas son altas y puede resultar complicado para algunos huéspedes.

Habitación y baño estupendos. Cama muy cómoda y tranquila. Desayuno variado, casero y abundante. Buena atención del personal.

Me gustó todo.

Este encantador hotel rural es el lugar perfecto para aquellos que aman la fiesta y disfrutan de la naturaleza. Situado en un entorno impresionante, rodeado de hermosos paisajes naturales, es ideal para relajarse y disfrutar de la tranquilidad. Las habitaciones de la parte superior ofrecen unas vistas impresionantes al Monasterio de Yuste. Además, el personal es amable y atento, asegurando que su estancia sea cómoda y agradable. El desayuno es delicioso y variado, y el servicio es impecable.

La falta de personal puede resultar un inconveniente en momentos de alta demanda.

El alojamiento está ubicado en un encantador pueblo en plena naturaleza, rodeado de un paisaje impresionante en primavera. Es un lugar ideal para relajarse y disfrutar de la tranquilidad. Además, está muy cerca del Monasterio de Yuste, lo que permite visitarlo fácilmente. Las habitaciones son amplias y confortables, con baños espaciosos. El servicio es amable y el desayuno variado. se destacan las instalaciones como la piscina y el restaurante.

Algunos huéspedes mencionaron que se escucha algo de ruido en las habitaciones cercanas al bar-restaurante, pero no es un problema generalizado.

La ubicación, el personal, la decoración, la ducha.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara.

El hotel es precioso y el trato muy agradable. Buena relación calidad-precio. Habitaciones grandes y con terraza. Desayuno estupendo. Personal detallista.

No.

En primavera, este encantador pueblo es el lugar perfecto para descansar rodeado de una naturaleza impresionante. Las habitaciones en la zona superior del hotel ofrecen una vista cercana al Monasterio, lo cual es una ventaja. Además, los baños están limpios y el servicio es amable. El desayuno es perfecto para empezar el día, y la terraza con la fuente de agua es un lugar relajante para disfrutar. El hotel también cuenta con una piscina para refrescarse durante los días calurosos.

Las luces del hotel a veces hacen un zumbido molesto.

Me encantó este hotel. La ubicación era perfecta, cerca del monasterio de Yuste y en un pueblo encantador rodeado de una naturaleza impresionante. Las habitaciones en la parte alta eran muy bonitas y cómodas, perfectas para relajarse. El servicio fue excelente, el personal siempre estaba dispuesto a ayudar y el servicio de limpieza mantuvo todo impecable. Además, el hotel ofrecía tours y asistencia para organizar actividades locales, lo cual era muy conveniente. También disfruté de las comodidades de la habitación, como el aire acondicionado y el set de té y café. La terraza y el patio eran lugares encantadores para disfrutar de unas vistas preciosas. Definitivamente recomendaría este hotel a cualquiera que busque una estancia confortable y tranquila en esta zona.

Recomendaría este hotel a la familia, ya que ofrece un ambiente acogedor y confortable para disfrutar de unas vacaciones relajantes.

Habitaciones amplias y cómodas, aire acondicionado magnífico. Ubicación céntrica para explorar la zona. Destacable la amabilidad y profesionalismo del personal. Desayuno con tostadas, zumo natural y bizcocho casero. Buena opción para una estancia agradable.