Después de un largo día caminando el Camino, llegamos un poco tarde y nos recibió el propietario, haciéndonos sentir como en casa de inmediato. Las habitaciones eran cómodas y las camas suaves como algodón. Las duchas calientes fueron un regalo del cielo. El desayuno fue delicioso y nos llenó de energía para seguir nuestro camino. Las vistas al jardín eran preciosas y relajantes. Nuestra anfitriona irlandesa, Carol, fue muy amable y nos ofreció consejos para los siguientes días de caminata. Definitivamente, nos trataron como la realeza. Podíamos imaginar lo agradable que sería relajarse en el bar al aire libre durante la temporada alta.

No hubo nada que no nos encantara durante nuestra estancia. Quizás, sería útil tener más opciones de almuerzo o cena cerca del hotel, ya que el restaurante más cercano en coche estaba a unos kilómetros.

Este alojamiento fue un trocito de cielo para nosotros. tuvimos un día larguísimo caminando el Camino y estábamos un poco preocupados si este lugar valdría la pena los kilómetros extra. Llegamos un poco tarde pero nos recibió el dueño y nos sentimos instantáneamente como en casa y cómodos. El hotel nos hizo sentir como la realeza que solía vivir allí. Disfrutamos de duchas calientes y las habitaciones y camas cómodas. Me imaginaba que en la temporada alta, el bar al aire libre con vistas a los manzanos sería el lugar perfecto para relajarse. El desayuno fue maravilloso y nos dio energía renovada y combustible para continuar nuestro Camino. Estábamos agradecidos por nuestra amable anfitriona irlandesa Carol, ¡que hablaba inglés y nos ofreció consejos para los próximos días de caminata! ¡un saludo desde Italia!

El trato del personal fue excelente y familiar. Nos recibieron incluso estando fuera del horario establecido y siempre fueron amables y atentos durante nuestra estancia. Tuvimos la suerte de contar con la ayuda de Bea y María, que fueron encantadoras y nos proporcionaron toda la información necesaria sobre los alrededores, tanto cultural como gastronómica. Además, la limpieza en el hotel fue impecable y las instalaciones eran espectaculares. La habitación era enorme, con una ducha con columna de hidromasaje y una temperatura muy agradable. También nos encantó el bonito salón común, donde podíamos relajarnos y disfrutar de la tranquilidad del lugar. El desayuno, cortesía del hotel, fue un detallazo y nos dio energía para el día. Por último, destacar la buena ubicación del hotel, cerca del restaurante más cercano en coche, lo cual fue muy conveniente.

No hay nada malo que decir.

Estuve hospedado en el encantador Hotel Rural Palacio de Galceran durante unos días para disfrutar de la naturaleza y explorar la zona. El alojamiento está decorado con un gusto exquisito y se encuentra en un entorno tranquilo, perfecto para desconectar. El personal fue muy atento, detallista y amable, haciéndonos sentir realmente bienvenidos. Además, los bizcochos y madalenas caseros que nos sirvieron en el desayuno estaban deliciosos. La ubicación del hotel es ideal, ya que está cerca de Campomanes y Pola de Lena, por si quieres disfrutar de un entorno más urbano en algún momento de tu estancia. Sin duda, una experiencia maravillosa.

Puedo recomendar este hotel a todos.

La casa es espectacular, con una decoración exquisita. Cuenta con microondas y cafetera, lo cual es ideal para los madrugadores. Las habitaciones son muy confortables, con bañera de hidromasaje y ventanal en el techo que permite ver el cielo. La ubicación es perfecta para acceder al parque de Las Ubiñas y está cerca de la autovía, lo que facilita explorar otras zonas de Asturias. Ideal para montañeros y turismo rural. Excelente trato por parte de los anfitriones, quienes proporcionan información y solucionan cualquier problema. Posibilidad de utilizar el comedor y el porche para preparar comida o hacer barbacoa.

Me sentí bienvenido, no tengo ninguna queja en absoluto.

El hotel tiene un ambiente encantador, con detalles cuidados y limpieza impecable. El personal es amable y atento, especialmente Bea, la dueña del hotel. El desayuno es delicioso, con opciones para diferentes preferencias alimenticias. Recomendaría este hotel a cualquiera que busque una estancia acogedora y relajada.

Me sentí súper cómodo, no tengo ninguna razón para quejarme.

El hotel está ubicado en una zona ideal para disfrutar de la naturaleza, con acceso directo al parque de Las Ubiñas y cerca de la autovía para explorar otras zonas de Asturias rápidamente. Además, cuenta con un área con microondas y cafetera, perfecto para los amantes del montañismo madrugadores. En las habitaciones, se puede disfrutar de confortables camas con bañeras de hidromasaje e incluso algunas habitaciones tienen ventanas en el techo que te permiten ver el cielo. ¡Espectacular!

Hay detalles a mejorar, como la falta de opciones de pago con tarjeta y la carencia de pequeñas mesas en las habitaciones para trabajar con el portátil.

Pasé una noche en el precioso Hotel Rural Palacio De Galceran y me hubiera encantado quedarme más tiempo. La casa es una joya, con una decoración detallada y impecable en cada rincón. El pueblo es pequeño pero ofrece la oportunidad de visitar el puerto de la Cubilla o Pajares y hacer rutas por la zona. Bea, la propietaria, fue muy amable y nos permitió guardar nuestras motos bajo techo, lo cual fue muy apreciado. El desayuno incluido en el precio de la habitación es delicioso, con bizcochos y magdalenas caseras que merecen mucho la pena. Además, la conexión wifi funcionaba perfectamente y las habitaciones y baños son espaciosos.

Por supuesto que lo recomiendo.

La habitación muy amplia y cómoda para familias con niños pequeños! Buena temperatura, trato muy agradable por parte de la propietaria. La casa espectacular, un lujo de hotel con varios salones, chimeneas de leña por toda la casa, decoración de la época de la vivienda con buen gusto.

Insisto, este lugar es super recomendado.

Tuve una experiencia maravillosa en Rural Palacio de Galceran. Los anfitriones fueron amables y cercanos, siempre dispuestos a ayudar con cualquier duda o problema que surgiera. Pude disfrutar de las instalaciones exteriores, como el porche y el comedor, donde pude preparar mi propia comida o hacer una barbacoa. Además, la ubicación del alojamiento es perfecta para explorar Asturias, ya que está cerca de la autovía. me sentí seguro, ya que pude guardar mi vehículo dentro del recinto privado. Sin duda, es un lugar ideal para los amantes de las motos.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara. 😊

El sitio es increible! Pero lo realmente espectacular fue la atención recibida. El personal encantador, Bea nos atendió de lujo, te hace sentir como en casa. El ambiente que se respira es familiar. La habitación super amplia y muy limpia y ordenada, decorada con mucho gusto. La decoración en general del hotel es una pasada, tiene unos salones muy amplios y decorados de cine. Hemos pasado unos días inolvidables y como hemos hablado con Bea, ¡amenazamos con volver! Muchísimas gracias por todo, por tu simpatía y amabilidad, pero sobretodo por ayudarnos en todo. Eres increible. ¡Besote enorme!

No dudaría en recomendar este hotel.