Fui con mi hijo de 6 años y desde el momento en que llegamos, nos trataron como parte de su familia. Las habitaciones eran espaciosas y bonitas, y el ambiente del palacio era tranquilo y relajante. El propietario, Antonio, fue muy atento en todo momento y su señora Alicia nos preparó comida casera deliciosa. El desayuno era de alta calidad y los tés que me prepararon cada día eran exquisitos. En resumen, superaron mis expectativas y sin duda recomendaré Rural Palacio de Prelo. A pesar de que el lavamanos me quedaba un poco alto, no afectó mi estancia en general. En conclusión, este hotel es altamente recomendable.

Increíble palacio espectacular. Habitación ideal, vistas hermosas. Abundante y delicioso desayuno. Trato y servicio exquisito. Oasis de paz y tranquilidad. Espacios ordenados y particulares. Anfitriones amables y acogedores. Recuerdos maravillosos, volveremos pronto.

Nada, todo excelente.

Paisaje, comida y antigüedad del palacio excepcionales, junto con la atención perfecta de los anfitriones. Desayuno magnífico, descanso placentero en la habitación con vistas increíbles. Decoración, jardines y entorno deliciosos. Ruta de los miradores del río Navia hermosa. Ideal para tranquilidad, relax y disfrutar de un paraíso.

El hotel es una maravilla con una arquitectura hermosa. Las habitaciones son amplias y acogedoras, con vistas impresionantes. El desayuno y la cena son deliciosos y abundantes. El personal es muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudar con rutas y recomendaciones.

La limpieza impecable en todas las estancias, incluyendo las habitaciones y los espacios comunes. Las instalaciones del hotel son simplemente espectaculares, desde los jardines hasta el salón con homecinema. El desayuno es delicioso y ofrece una gran variedad de productos de alta calidad. El personal del hotel es extremadamente amable y servicial, siempre dispuesto a ayudar con cualquier consulta o petición.

No hay nada que no me haya gustado.

A pesar de esto, la ubicación del hotel era realmente magnífica. Situado en medio de la naturaleza asturiana, ofrecía vistas espectaculares a los prados y a las montañas, lo cual permitía disfrutar de un entorno tranquilo y relajante. Además, las habitaciones eran espaciosas y acogedoras, proporcionando comodidad y descanso. El desayuno era abundante y de buena calidad, con una variedad de opciones para todos los gustos. Por último, el trato y el servicio del personal, mencionado en las reseñas, era excepcional, asegurando una experiencia satisfactoria para los huéspedes.

El hotel carecía de ascensor, lo que dificultaba el traslado de las maletas a la habitación.

las vacaciones en Boal fueron maravillosas y el Hotel Rural Palacio de Prelo superó mis expectativas. La atención y amabilidad de los propietarios, la comodidad de la habitación, las instalaciones y las vistas al valle fueron impresionantes. El ambiente relajante y el delicioso desayuno preparado por Alicia fueron especialmente destacables. Sin duda, espero repetir esta experiencia pronto.

El lavamanos estaba demasiado alto para mí.