la ubicación del hotel fantastico es maravillosa, a solo 20 metros del mar. La playa es pequeñita pero preciosa, un rincón tranquilo y paradisíaco. El hotel cuenta con solo 5 habitaciones, pero todas son preciosas, especialmente la ducha que está completamente acristalada, ideal para una noche romántica. El personal, especialmente el encargado Luis, es muy profesional. En resumen, una experiencia única en un lugar espectacular.

me encantó mi estancia en begur y esta vez elegí Sa Tuna para descansar y relajarme. Las habitaciones modernas con terraza y vistas al mar eran perfectas para relajarse. Destacaría el fantástico restaurante, con desayunos espectaculares y comida de buena calidad. El amable servicio hizo que me sintiera como en casa, sin agobios.

Faltaba un teléfono en la habitación para contactar recepción.

Las habitaciones tienen una decoración moderna y vistas al mar impresionantes. Están limpias y tienen detalles como zapatillas y botellas de agua en las mesillas. El desayuno es espectacular, con una gran variedad de opciones como bollería, jamón serrano, queso, pan tumaca, zumo natural.- El personal es amable y atento, especialmente la chica china que nos atendió. Nos dieron buenas sugerencias y nos hicieron sentir como en casa.

Nada de nada.

Habitaciones modernas y con terraza. Restaurante con desayunos espectaculares. Comida de buena calidad. Servicio amable. Ubicación inmejorable. Recibimiento excepcional. Trato inmejorable por parte del personal. Vistas impresionantes.

No hay nada malo que decir.

Ubicación perfecta frente al mar. Habitaciones renovadas y cómodas. Detalles como cafetera y cápsulas en el pasillo. Personal amable y comida increíble. Desayunos impresionantes con productos locales. Volveremos seguro.

El hotel Sa Tuna es simplemente perfecto. Desde el momento en que entras, te das cuenta de la atención al detalle que han puesto en cada aspecto de tu estancia. La ubicación en la costa es inmejorable y las vistas al mar desde la habitación con balcón son simplemente impresionantes. Además, el precio es muy razonable considerando todo lo que ofrece este hotel.

Todo fue espectacular, no tengo ninguna queja.

La ubicación del hotel es inmejorable, ya que está frente a la playa y frente al mar. Las vistas desde las habitaciones son espectaculares, especialmente al amanecer. El desayuno es de muy buena calidad y se puede disfrutar en la terraza de la habitación. El servicio del personal es atento y agradable, siempre pendientes de nuestras necesidades. Además, la limpieza y los detalles de la preparación de la habitación son impecables.

El parking no está incluido en el precio y hay que pagarlo aparte por día.

La ubicación privilegiada de este hotel en primera línea de mar en Sa Tuna es simplemente inmejorable. Despertar con vistas al mar y poder disfrutar de una playa tranquila y poco concurrida es una auténtica maravilla. Las habitaciones son cómodas y están totalmente actualizadas, ofreciendo una estancia muy agradable. Además, el personal del hotel es amable y atento, brindando un servicio ideal. El restaurante del hotel ofrece una deliciosa cocina mediterránea con un toque moderno, haciendo que cada comida sea todo un placer. Mención aparte merece el detalle de tener una cafetera y cápsulas disponibles para los huéspedes en el pasillo, algo muy conveniente. En resumen, mi estancia en este hotel fue perfecta y sin duda lo recomendaría.

La ubicación y las vistas de la habitación son increíbles. La decoración está cuidada al detalle y el desayuno del restaurante es buenísimo. El personal es atento y resuelve problemas de reserva. Además, hay un tramo del Camí de Ronda muy agradable cerca del hotel.

La habitación es pequeña y el balcón no ofrece privacidad ni silencio. Durante el día, puede haber ruido debido a la cercanía del restaurante.

El trato familiar y la ubicación excepcional son las características destacadas de este hotel. Las habitaciones ofrecen vistas y tranquilidad, y el desayuno y la comida son de muy buena calidad. El servicio de habitación es rápido y eficiente.

Me sentí como si me trataran como a un rey, no he tenido ningún inconveniente.

pequeño hotel encima del propio restaurante. habitación no muy grande, pero con terraza a la playa en una calita estupenda, ubicación inmejorable. camas y almohadas muy muy cómodas, ducha perfecta. atención del personal y desayuno increíble al lado del mar. un sitio estupendo.

aparcamiento sin mando para el coche