El colchón de la cama excelente, habitación confortable y limpia, vistas impresionantes. La dueña muy simpática y atenta.

Desayuno confuso con el precio.

Tuve una estancia muy agradable en Sindika. La ubicación del hotel es perfecta para aquellos que buscan tranquilidad y paisajes naturales de montaña. Además, las vistas a los montes son increíbles y cuando había poco viento, podía escuchar mi propio eco.

Aunque el hotel es sencillo, cumplió con todas mis necesidades para un fin de semana. Las camas eran grandes y cómodas, perfectas para descansar después de hacer rutas de senderismo por la zona.

Ubicación perfecta para rutas de senderismo. Trato amable. Vistas impresionantes. Habitaciones espaciosas y cómodas. Precio justo. Personal cordial. Comida casera deliciosa. Ambiente tranquilo y familiar

La estancia en Oñate fue genial, pero Hotel Sindika fue aún mejor. Las vistas desde las habitaciones eran impresionantes y el ambiente tranquilo era perfecto para relajarse. El personal fue amable y servicial, y el desayuno fue excelente. Sin duda, superó nuestras expectativas.

Insonorización de las habitaciones podría mejorar.

El alojamiento en este hotel fue simplemente excepcional. Desde el excelente colchón de la cama hasta las vistas impresionantes desde la habitación, todo fue perfecto. El personal, siempre atento y amable, hizo que me sintiera como en casa. La limpieza del hotel era impecable y las instalaciones estaban en óptimas condiciones. Además, el desayuno era delicioso y la comida casera que ofrecían era sencilla pero bien cocinada. Sin duda alguna, una de las mejores partes fue la ubicación del hotel en la cima de una montaña, cerca del famoso santuario. Las vistas panorámicas eran simplemente impresionantes y me permitieron relajarme en un entorno natural y tranquilo.

Nada, es perfecto. Este hotel superó todas mis expectativas y no puedo encontrar ningún aspecto negativo para destacar.

El lugar en el que nos alojamos era simplemente excepcional. Estaba situado en lo alto de una montaña, rodeado de paisajes impresionantes y naturaleza viva. Además, el hotel contaba con una piscina y una tasquita, ofreciendo un ambiente tranquilo y relajado. Los precios eran muy buenos. Las habitaciones eran sencillas pero más que suficientes, y el personal siempre estuvo dispuesto a ayudarnos en todo lo que necesitábamos. disfrutamos de la ruta de las campas de Urbía, que comenzaba justo al lado del hotel.

El único aspecto negativo fue la necesidad de reforma en algunas habitaciones, que parecían desfasadas en comparación con otros lugares.

Lo mejor de mi experiencia durante mi pascua fue la increíble ubicación del hotel. Estaba rodeado de hermosas montañas que ofrecían vistas impresionantes. Además, el hotel se encontraba cerca de varias rutas de senderismo, lo cual fue perfecto para mis paseos diarios por la naturaleza. También disfruté de la comida casera del hotel, que era deliciosa. Fue genial probar platos auténticos de la región y a muy buen precio.

Hubo algunos aspectos negativos que afectaron mi estancia en el hotel. En primer lugar, la falta de variedad en la comida de la taberna fue decepcionante.

Pasamos el día en San Sebastián y decidimos hacer noche en este hotel para visitar el Santuario de Nuestra Señora de Aránzazu que está a menos de 2 minutos andando. Como íbamos a llegar tarde al hotel, decidimos para en Oñate a cenar y viendo que estaban tardando muchísimo en atendernos decidimos llamar al hotel para preguntar la hora tope de llegada. La dueña se ofreció a prepararnos unos bocadillos de tortilla y jamón y optamos por esa opción. Las habitaciones son normalitas, pero con una camas confortables. Las vistas son impresionantes y el lugar muy tranquilo. La dueña tiene un sentido del humor muy peculiar. ¡Nos cayó muy simpática! :-)

Super recomendado.

El hotel está ubicado en lo alto de las montañas cerca de un famoso santuario, lo que ofrece unas vistas espectaculares.

Ni una sola cosa.

El ambiente natural en los alrededores del alojamiento es perfecto para hacer senderismo. Las habitaciones son amplias, limpias y cómodas, con bonitas vistas a las montañas. El personal es amable y consciente de las medidas de seguridad. Buenos precios en el desayuno buffet.

Tuvimos una estancia muy agradable en Sindika. El entorno natural era espectacular y perfecto para hacer senderismo. La comida casera en el restaurante era deliciosa y a un precio razonable. Aunque las instalaciones eran antiguas, estaban bien mantenidas. El personal de limpieza era amable y servicial.

Este hotel en la montaña ofrece una ubicación impresionante, con vistas hermosas desde las habitaciones y el comedor. Las camas son cómodas y las habitaciones están limpias, con baños de buena calidad. El desayuno ofrece opciones básicas pero decentes. El personal es amable y servicial, a excepción de algunas experiencias negativas que otros huéspedes han mencionado. En general, el ambiente tranquilo y la belleza natural del entorno hacen de este hotel un buen lugar para disfrutar de la zona.

Aunque la mayoría de los huéspedes han tenido una buena experiencia, algunos han compartido que el servicio del personal puede ser desagradable en ocasiones.

Las vistas son espectaculares desde el balcón y terracita. Muchas rutas por el bosque vasco. Personal amable. Habitación amplia con terraza tranquila y bonitas vistas. Desayuno correcto, sin mucha variedad pero no está mal. Duchas con control de temperatura.

La ubicación del hotel es perfecta para aquellos que buscan tranquilidad y disfrutar de paisajes naturales de montaña. Las vistas son impresionantes y la habitación cuenta con una amplia terraza que ofrece vistas a la montaña y mucha tranquilidad. El trato del personal fue bueno en general y la ducha en la habitación tenía un buen control de temperatura. La piscina también está disponible para los huéspedes.

Me sentí muy seguro, no tengo ninguna queja en absoluto.