El personal es encantador y atento. La ubicación es fantástica para hacer rutas. El desayuno es rico y abundante, con café, fruta, tostadas y bizcocho casero. Las habitaciones son reconfortantes después de estar en la nieve. Las vistas a la montaña son impresionantes. 🏔️.

Excelente estancia en un entorno natural precioso

Recomiendo este alojamiento a todos los amantes de la naturaleza y la tranquilidad. La anfitriona es muy amable y te hace sentir como en casa. El desayuno es delicioso y abundante, perfecto para empezar el día antes de explorar el Parque Nacional de Somiedo. La habitación podría ser un poco más espaciosa para una cama de matrimonio, y el olor a cañería en el baño podría mejorar, pero en general, la experiencia fue maravillosa. ¡Volveremos sin duda alguna!

Menuda ganga! ¡Qué jardín más cuco! ¡Y vaya desayuno, hasta leche de avena! Me lo pasé bomba en la terraza. Asturias es mi próximo destino, ¡por supuesto!

Me encanta tener mi cama pegadita al baño. ¡Qué bien huele la cañería!

Nuestra estancia en un pueblo maravilloso del Parque Nacional de Somiedo fue perfecta. Natalia nos cuidó como familia, su atención fue excepcional. La casa de piedra era acogedora, con desayunos deliciosos y bizcochos caseros. Camas cómodas, ambiente cálido y recomendaciones únicas para avistamientos de oso y rutas de senderismo. ¡Experiencia inolvidable!

Super recomendado!

Excelente relación calidad-precio, habitación acogedora. La ubicación es perfecta para disfrutar de la naturaleza y el personal te trata de maravilla.

La comida matutina podría tener más variedad para mejorar.

La ubicación del hotel es excelente, alejado de todo y rodeado de un paisaje espectacular. Además, el entorno ofrece tranquilidad absoluta y mucha paz. Las habitaciones son espectaculares, todas de madera y con techos abovedados, lo que les da un toque moderno y bonito. Las camas son muy cómodas, lo que garantiza un buen descanso. Asimismo, el servicio es muy amable y atento, destacando la amabilidad y cortesía de la anfitriona Natalia. El desayuno es delicioso, con opciones variadas y productos de calidad.

Las habitaciones son un poco ajustadas en cuanto a tamaño y las paredes permiten escuchar a los demás.

El hotel es rural y acogedor, con habitaciones amplias y bien equipadas.

Todo bien.

La situación es perfecta para hacer la ruta de los lagos. El pueblo tiene mucho encanto, el ambiente es muy rural y tranquilo si es lo que buscas, con vistas de la montaña fantásticas, y además tiene un par de restaurantes donde se come de lujo. La habitación superior que cogimos era muy amplia, abuhardillada y todo muy limpio. Los propietarios muy cariñosos y facilitándote todo lo necesario. El desayuno muy completo y con productos de la zona caseros.

Me sentí afortunado, no tengo ninguna pega.