Personal amable, excelentes vistas, desayuno abundante y variado, opciones de rutas de montaña, buena ubicación cerca de la estación.

Nos encantó nuestra estancia en este hotel en Panticosa. Una de las cosas que más disfrutamos fue la ayuda que recibimos de Jaime, el propietario, quien nos brindó información detallada sobre rutas de montaña, restaurantes y paseos. Aprovechamos al máximo los cuatro días que estuvimos allí. Además, la terraza del hotel fue un lugar perfecto para desayunar y relajarnos después de nuestras excursiones. Aunque el hotel necesita una reforma, valoramos mucho la calidad y el encanto que ofrece su propietario.

Quizás una desventaja es que el hotel no cuenta con ascensor, lo que puede ser un inconveniente especialmente si llevas un carrito. También hay que tener en cuenta la pendiente para acceder al centro del pueblo.

Hotel familiar con vistas excepcionales, bien ubicado, limpio y cuidado. Personal amable y atento, ofrece un desayuno rico y variado. Cuenta con parking propio y habitaciones amplias y cálidas. Ideal para un fin de semana de esquí. Sin duda volveremos.

La vista espectacular de la habitación con montañas y el pueblo. La terraza llena de plantas y vistas al pueblo. Rapidez en el checking y checkout. Buena ubicación con aparcamiento y cerca del centro. Buen trato del personal. Cómodas habitaciones y camas. Buena relación calidad/precio. Desayuno con variedad de alimentos.

No tiene que mejorar nada.

Al hospedarnos en este hotel, nos encantó la ubicación, ya que está situado en un encantador y pintoresco barrio antiguo. Pudimos disfrutar de hermosos recorridos por las estrechas calles empedradas de Panticosa. Además, la habitación era espaciosa y cómoda, ofreciendo un ambiente relajante para descansar después de un largo día. El personal era amable y servicial, y el desayuno tenía una gran variedad de opciones para empezar el día de manera deliciosa y satisfactoria.

Encontramos que las instalaciones del hotel estaban un poco deterioradas, lo cual afectó nuestra experiencia.

Personal atento y amable. Desayuno variado y abundante. Limpieza impecable. Buena ubicación cerca del centro y de la carretera. Terraza con vistas impresionantes.

Si buscas un lugar para hospedarte con tu familia, el hotel es perfecto. Está ubicado en una tranquila zona del pueblo, rodeado de calles antiguas y estrechas. Las habitaciones son amplias y cuentan con baños renovados, adaptados para personas con movilidad reducida. La atención del personal es excelente, siempre dispuestos a ayudar. Además, el desayuno tipo buffet ofrece una variedad de opciones y se puede disfrutar de unas vistas preciosas desde la terraza del hotel.

El único inconveniente es la conexión de wifi, que suele ser lenta.

El hotel está ubicado en un lugar pintoresco, en el centro del pueblo, lo cual permite disfrutar de los encantos de Panticosa. Las estrechas calles y rincones antiguos le dan un toque encantador y auténtico al hotel. Además, las habitaciones son amplias y cómodas, con camas confortables y una temperatura agradable.

El desayuno deja mucho que desear en cuanto a calidad y variedad de alimentos.

¡Una escapada romántica increíble! Disfrutamos de unas vistas impresionantes desde la habitación, que era espaciosa y cómoda. Además, el hotel está perfectamente ubicado cerca de la estación de esquí y el personal fue muy amable y servicial.

Nos un poco la falta de ventilación en la habitación, ya que se percibía un fuerte olor a humo de cigarrillo. También notamos que las toallas no estaban tan limpias como esperábamos.

El hotel cuenta con unas vistas espectaculares y está perfectamente ubicado para aquellos que desean esquiar. Además, ofrece guarda esquís y se encuentra a poca distancia de las pistas. El lugar es muy tranquilo y las camas son cómodas. El desayuno es completo y se puede disfrutar de fruta, pan, café, zumo de naranja, queso y jamón. El personal es muy amable y te proporciona recomendaciones sobre lugares para visitar en la zona.

No hay nada que no me gusta.

Personal amable, ubicación buena, vistas impresionantes, desayuno abundante, ambiente relajado, edificio con encanto.

Todo fue perfecto.

La ubicación del hotel es conveniente, con las mejores vistas y sin necesidad de entrar al pueblo.

Na.

El desayuno buffet era variado y delicioso. Nos encantó la opción de tener tomate natural en lugar de tomate de bote para las tostadas. Además, la vista desde el comedor durante el desayuno era simplemente espectacular. disfrutamos de la hermosa terraza del hotel, que ofrecía una tranquila vista de los Pirineos y el encantador pueblo de montaña. A pesar de tener algunos años, el hotel estaba limpio y bien mantenido.

disfrutamos de unas vacaciones relajadas en Panticosa y el Hotel Vicente superó nuestras expectativas. Habitaciones cómodas, personal amable y atento, y una ubicación conveniente cerca de las pistas de esquí. Repetiremos el próximo año.

falta de ventilación y olor a humo en las habitaciones