Nos alojamos en una habitación triple con vistas impresionantes. El personal era muy amable y atento, y las instalaciones del hotel eran excelentes, con una mesa de ping-pong y una piscina al aire libre. Además, disfrutamos de una deliciosa comida casera y de desayunos abundantes. nos encantó la ubicación del hotel, ya que permitía hacer paseos por los alrededores.

Esto dificultaba el acceso a la piscina, especialmente para personas con discapacidad.

Me encantó el entorno natural y la tranquilidad que se respiraba en este lugar. Además, las instalaciones eran muy bonitas y acogedoras. Uno de los aspectos que más me gustaron fue la comida, con platos variados y muy elaborados. destacaría la gran atención del personal, quienes hicieron que me sintiera como en casa. Por otro lado, pude disfrutar de amplios espacios para relajarme y estar tranquilo. Fue realmente agradable estar rodeado de tanta belleza natural.

Hubo algunas cosas que no me gustaron. Por ejemplo, la señal de wifi en mi habitación era muy débil, lo cual fue frustrante en algunos momentos.

Pasamos una hora en el establecimiento y nos sorprendió la tranquilidad y encanto del lugar. Las instalaciones eran adecuadas para desconectar, con hermosos paisajes naturales para hacer caminatas desde el hotel. Además, lo mejor fue poder estar con nuestros perros en todas las estancias y tener una zona especialmente designada para soltarlos. El desayuno fue delicioso y también tuvimos la oportunidad de cenar allí, disfrutando de diversas opciones y bebida incluida. Los dueños fueron muy simpáticos y amables en todo momento.

No encontramos nada malo durante nuestra estancia. 😊

Nuestra estancia en este lugar fue perfecta. Nos encantó la atención y el trato amable de los propietarios. La comida era excelente, con sabores sorprendentes preparados con amor. Además, el desayuno era muy completo. La casa estaba decorada con gusto y era acogedora. Nos encantó que ofrecieran café e infusiones gratuitas las 24 horas. Sin duda, es un lugar perfecto para desconectar y estar en plena naturaleza. nos gustó mucho que permitieran mascotas, ya que pudimos venir con nuestro perro y se sintió muy bienvenido. El espacio ofrecía suficiente para que nuestro perro corriera y había un paraje fantástico cerca para pasear. Además, el personal nos proporcionó información turística y nos ayudó a seleccionar rutas. En resumen, recomendaría este hotel sin dudarlo.

Lugar tranquilo y relajante. Hermosa casa y jardín cuidado.Atentos a todos los detalles.Buena comida casera.

Nada, todo fue maravilloso.

La ubicación de este hotel rural es ideal para disfrutar de la naturaleza y hacer paseos por los alrededores. Además, las habitaciones son acogedoras y bien cuidadas, lo que garantiza una estancia cómoda. Por otro lado, el desayuno es delicioso y variado, con opciones caseras que complacen a todos los gustos. Asimismo, las instalaciones como la piscina y la mesa de ping pong añaden un toque de diversión a la estadía.

La piscina del hotel no está adecuada para niños pequeños, ya que es alta y no cuenta con una rampa de acceso.

Me encantó la estancia en L'Amagatall. Fuimos con nuestro perro y los anfitriones fueron muy atentos, tienen zonas especiales para que pueda correr y disfrutar sin preocupaciones. La casa es preciosa y los detalles cuidados al máximo. La comida, tanto la cena como el almuerzo, estaban buenísimos. Lo recomendamos muchísimo y seguro repetiremos. Sin duda, lo mejor de todo fue la amabilidad y hospitalidad de Anna y Sergi.

De verdad que lo aconsejo.

Lo mejor de este hotel fue la ubicación tranquila y las increíbles vistas a la montaña. Además, el personal fue muy amable y proporcionó un servicio exquisito. disfruté del desayuno abundante y del ambiente acogedor del hotel.

No había nada que no me gustara.