Trato espectacular. Alojamiento solo para nosotros. Habitación amplia y cómoda. Cocina bien equipada. Buenas ubicación.

No me puedo quejar de nada.

la estancia en La Alpargateria fue simplemente genial. La casa rural es encantadora, las zonas compartidas están bien equipadas y la limpieza es excepcional. Pero lo mejor fue la atención y amabilidad de Cristina, quien se desvivió para que tuviéramos una estancia ideal. Definitivamente, merece más de un 10 de calificación.

Las escaleras son desiguales y requieren cuidado al subir o bajar.

Lo que más nos gustó de La Alpargatería fue la hermosa casa antigua y su encanto. Nos encantó lo limpio y acogedor que estaba todo, y la decoración de las habitaciones era muy bonita. La cama era especialmente cómoda y las sábanas suaves. La ubicación era perfecta, cerca de Atapuerca y a solo media hora de Burgos. apreciamos la proximidad de un restaurante y un mesón donde comimos fenomenal a precios razonables. Además, Cristina, la anfitriona, nos trató de maravilla, fue muy amable y nos dio buenos consejos sobre la zona. Sin duda, repetiremos nuestra estancia en La Alpargatería.

Las únicas pequeñas pegas que encontramos fueron que las escaleras de la casa eran desiguales, por lo que había que tener cuidado al subir y bajar. hubiéramos apreciado tener una toalla de mano en cada habitación, ya que solo había una muestra para ducha y manos.

La casa rural es perfecta. Bonitas habitaciones. Tiene dos cocinas que puedes utilizar. Ideal si estás haciendo el camino de Santiago. Silvia y su hermana Cristina son dos joyas que se ocupan de que no te falte de nada y de ayudarte en todo lo que sea posible. Aunque esta cerca de la carretera, en las habitaciones no se oye nada. Te sientes como en casa literalmente. Para volver seguro. 25 euros habitación individual.

Me sentí bien acogido, no tengo ninguna queja.

Pasamos un fin de semana maravilloso en una casa rural encantadora a medio camino entre La Rioja y Burgos. Las habitaciones estaban decoradas con buen gusto y las camas eran muy cómodas. Disfrutamos de las dos cocinas completas y del restaurante-bar de comida casera que estaba al lado. aprovechamos el rincón de la azotea con una chimenea castellana y los instrumentos de labranza que le daban un toque especial. Recomendamos dar un paseo por la zona de la presa y ermita de Oca, y además disfrutamos de unos masajes terapéuticos que nos dejaron como nuevos.

Si hay que mencionar algo, las escaleras originales de la casa son desiguales, por lo que hay que tener cuidado. sería mejor que cada habitación tuviera una toalla de mano.

¡Qué decir de La Alpargatería! Es simplemente sensacional. El alojamiento es una casa rural encantadora con zonas compartidas bien equipadas y una limpieza extraordinaria. Pero lo mejor es la atención de Cristina, quien se desvive por hacer que la estancia sea ideal. Nos ofreció una habitación extra sin cargo y se aseguró de que no nos faltara nada. Sin duda, uno de esos lugares que merecen más de un 10 de calificación.

Nada. 😊